Desidia política y paramilitarismo bloquean la paz en Colombia

La apertura de un nuevo ciclo electoral en Colombia, la falta de una voluntad expresa del Gobierno por afianzar el acuerdo de paz y el repunte del paramilitarismo bloquean “la esperanza de una paz real” en este país, según expertos que asisten al I Foro Internacional por la Paz en Colombia.

En este encuentro, que se realizó en Mérida (oeste de España), participan asesores y analistas de las “Mesas de Diálogo” con las guerrillas de las FARC y ELN, representantes de la sociedad civil y las comunidades rurales de este país, delegados de entidades humanitarias y portavoces de colectivos de defensa de la paz.

El regreso de los desplazados, la titularidad de las tierras y la violencia aún existente -más de 300 sindicalistas asesinados desde noviembre de 2016, fecha de la firma del acuerdo de paz con las FARC, son algunos de los temas analizados por los ponentes. A ello se suma la necesidad de que la comunidad internacional siga “atenta” a los procesos de paz con el fin de blindarlos.

Según el abogado y político español  Enrique Santiago, asesor de las FARC en sus negociaciones con el Estado en la Mesa de La Habana, el Gobierno colombiano solo ha aprobado las normas para el desarrollo de 12 de las 34 medidas recogidas en el Acuerdo de Paz, y después viene la apuesta en marcha de las mismas.

A juicio de Santiago, el ciclo electoral de este año le impide al Gobierno garantizar la aprobación de las leyes. Colombia celebrará elecciones legislativas el próximo 11 de marzo y presidenciales el 27 de mayo y los acuerdos de paz están presentes en el debate político.

Con este panorama, según remarcó, es “inviable” que se alcance un acuerdo en la Mesa de Negociación de Quito con la guerrilla del ELN.

En este sentido, la representante del Congreso de los Pueblos Marilen Serna apuntó que "el mayor responsable" de la debilidad que presentan los acuerdos de paz es el Gobierno colombiano. De hecho, añadió, solo el 15 % de los asuntos contemplados en la Mesa de La Habana se están iniciando.

A su juicio, “la incertidumbre y la desesperanza del proceso de paz” es evidente entre la sociedad colombiana, pues “no hay una voluntad expresa del Gobierno” por impulsarlo.

Además, insistió en que "hay muchas dificultades y barreras" en la Mesa de Diálogo con el ELN.

Serna exigió mayor participación y presencia de las comunidades de paz y de la sociedad civil en las Mesas de Diálogo, para que la paz “sea real, completa y llegue a todo” el territorio nacional. “Es una situación compleja, pero hay que remarcar que en todo proceso de paz, los primeros pasos son muy difíciles”, dijo la abogada especializada en las políticas de atención a víctimas de desplazamientos forzosos, Adriana Benjumea.