Tienden cerco fronterizo a sicario de abogado y buscan más imágenes
La Policía envió a todos los puestos fronterizos del país fotos e información del asesino para frustrar su posible salida al exterior. Buscan imágenes del punto desde donde hizo la última llamada a la víctima
Con la finalidad de evitar que el sujeto que asesinó a sangre fría al abogado Julio César Herrera Bassta escape a otro país, la Policía ya envió fotos, imágenes e información a todos los puestos fronterizos del país.
El comandante de la Policía de Santa Cruz, Alfonso Siles, informó que se están abocando a identificar al sicario elaborando un retrato hablado con imágenes captadas por particulares y cámaras públicas, así como información para enviar a todas las provincias de Santa Cruz y los puestos fronterizos del país. “Si este criminal se atreve a cruzar las fronteras, será aprehendido con seguridad”, manifestó Siles.
La autoridad aseguró que se extreman todos los esfuerzos para capturarlo y que, por lo delicado del hecho, todavía no se puede hablar de los móviles del crimen, aunque se manejan varias hipótesis, pero se necesita profundizar más las pesquisas para tener una idea con mayor fuerza.
Siles, sin embargo, señaló que se puede deducir que detrás del autor material del asesinato hay toda una estructura, responsables intelectuales y otras personas que en el curso de las investigaciones deben ser identificadas.
El jefe policial además recordó que como pruebas ya se recuperó una mochila con un martillo, dos gorras y la polera del asesino, además del teléfono celular que le arrebató al abogado Herrera luego de ejecutarlo.
Por otra parte, la Policía confirmó que brindó todas las garantías a una joven y a un hombre que encontraron el celular y la mochila para evitar represalias.
Imágenes de última llamada
La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), en coordinación con el Instituto de Investigación Técnico Científico de la Universidad Policial (Iitcup), realizan pericias a imágenes captadas del asesino y el flujo de llamadas del teléfono de la víctima.
Una de las premisas en las indagaciones es encontrar con certeza el punto o cabina de donde el sicario llamó por última vez al abogado, el miércoles 24, para confirmar su presencia en la oficina y después liquidarlo. La Policía cree que en ese punto había cámara de seguridad.
