Muere Stan Lee, una leyenda del cómic, el señor Marvel

“Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”, la moraleja con la que concluye la primera historieta del Hombre Araña (publicada en 1962 en Amazing Fantasy) es una de las frases más eficaces con las que se identifica el mundo del cómic. Su autor es el creador de un universo de héroes cada vez más infinito. Stan Lee, el hombre que ayudó a crear algunos de los personajes más perdurables del siglo XX como escritor y editor de Marvel Comics y supervisó la transformación de su compañía en un titán de los medios a nivel internacional, murió ayer en Los Ángeles. Tenía 95 años.

“Mi padre amó a todos sus fans. Fue el hombre más decente y grande”, dijo su hija Joan Celia.

Lee era para muchos la personificación de los cómics en general. Escritor, editor, ejecutivo de Hollywood y promotor incansable desempeñó un papel fundamental en la etapa de modernización de la historieta a partir de los años 60. El Hombre Araña, los X Men, los Cuatro Fantásticos, Iron Man, Hulk y Thor figuran entre los principales héroes que poblaron el mundo Marvel y que en el presente siglo alcanzaron nuevos niveles de popularidad, gracias al salto a la pantalla grande de varios de ellos. Las exitosas adaptaciones cinematográficas, en las que Lee siempre se reservaba un pequeño y humorístico cameo, habían llevado al artista de vuelta a los focos de los medios de comunicación. Ha aparecido en casi una veintena y se menciona que se guardó algunos para las próximas versiones de Capitana Marvel y Avengers 4.

“Solía sentirme avergonzado porque yo era solo un escritor de cómics mientras otra gente construía puentes o iba a la escuela de medicina. Luego me di cuenta, que el entretenimiento es importante en la vida de los demás. Si entretienes, estás haciendo algo bueno”, decía Stan Lee, un autor tan extraordinario como los personajes que creó.