Es el segundo crimen en tres meses en el denominado penal de ‘máxima seguridad’ del país, tras la muerte de ‘Oti’. Gómez fue sindicado por la muerte de Escóbar. Antes, lo condenaron a 30 años por el asesinato de Álvaro Escalante, en Las Cruces

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20 de septiembre de 2018, 4:30 AM
20 de septiembre de 2018, 4:30 AM

Exactamente tres meses después de que Víctor Hugo Escóbar Orellana, ‘Oti’, muriera apuñalado (19 de junio), la tarde de ayer fue asesinado Hardy Gómez Vaca (33), un ex ‘peso pesado’ de Palmasola y, según las autoridades, rival de ‘Oti’. Paradójicamente, ambos fueron asesinados en el que es considerado el recinto penitenciario más seguro del país, Chonchocoro de La Paz.

Tras confirmar el hecho la tarde de ayer, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, lanzó la hipótesis de que Gómez fue víctima de una ‘vendetta’, ya que fue señalado como uno de los autores del crimen de Escóbar, señalado como líder de una banda que cometía extorsiones y manejaba negocios turbios desde Palmasola. Recalcó que esa presunción debe ser investigada para ser confirmada.

Tras la intervención policial del 14 de marzo en Palmasola, ‘Oti’ fue trasladado a la cárcel paceña donde se encontró con Gómez, quien había sido llevado a ese reclusorio en marzo de 2017, para que continúe su condena de 30 años por el asesinato del joven Álvaro Escalante Soliz (19) en 2013, en Las Cruces, una comunidad cerca de Porongo.

Información a la que accedió EL DEBER apuntaba a que en Palmasola Gómez era un reo ‘pesado’ contrapuesto a las órdenes de ‘Oti’, quien fungía como regente del penal y que habría ‘filtrado’ fotografías en las que se veía a Hardy consumiendo bebidas alcohólicas en una piscina en la cárcel y gozando de comodidades, para provocar su traslado a La Paz y quitarlo de su camino.

Ayer en Palmasola, tras conocerse el crimen, por precaución, la población penal se encerró en sus pabellones (tal como ocurrió cuando mataron a ‘Oti’), por temor a que miembros del bando del fallecido tomen represalias contra los del grupo opuesto.

Una muerte violenta

Minutos después de ocurrido el hecho, el ministro Romero indicó a EL DEBER que Gómez había sido atacado por su propio compañero de celda. Más tarde, el subcomandante nacional de la Policía, Agustín Moreno, detalló que Gómez fue herido con armas punzo cortantes, golpeado con un objeto contundente en la cabeza y que tres brasileños sospechosos fueron aislados para ser investigados.

La muerte de Escóbar en junio se produjo en medio de una pelea en las canchas del reclusorio paceño. Gómez, junto con Einar Heredia Rivero, alias ‘Tony’, y Álvaro Chávez Nina, alias ‘Mono’, fueron imputados por el asesinato.

Reconoce fallas de controles

“Nos preocupa que en menos de un mes ha habido tres crímenes en centros penitenciarios, en El Abra (Cochabamba), en Villa Busch (Pando) y en Chonchocoro (La Paz); como autocrítica, creemos que los mecanismos de seguridad penitenciaria no están funcionando”, aseveró Romero, que atribuyó estos hechos a ‘pugnas de poder’ entre organizaciones criminales que se reproducen en los recintos penitenciarios.

“Desde una perspectiva estructural, tenemos que reflexionar sobre por qué están siendo rebasados los mecanismos de seguridad penitenciaria”, acotó. En lo inmediato, para evitar más vendettas en Chonchocoro, dijo que se reforzarán los mecanismos tecnológicos en la seguridad penitenciaria en los reclusorios del país y se realizará una investigación rigurosa del crimen de Gómez, además de mejorar las medidas de control y la revisión de los internos.

Cómo recuerdan a Hardy

Exreos que convivieron con Hardy Gómez en el penal de Palmasola lo describieron como un tipo que ‘no era abusivo’, aunque señalaron también que era la ‘antítesis’ de ‘Oti’, debido a que su poder no era ‘visible’ o ‘público’.

Sin embargo, cuando Gómez fue trasladado a La Paz los informes de Inteligencia hablaban de una persona que manejó negocios de armas y de drogas en el penal, y que estaba relacionado con bandas criminales de Brasil; incluso se indicó que era uno de los contactos del cártel narco brasileño PCC (Primer Comando de la Capital) en Santa Cruz.

Así también, se lo vinculó a la muerte del interno David Mauricio Baldelomar Vargas (33), exmiembro de la agrupación musical Jaque Mate, que fue victimado a golpes en septiembre de 2016 en Palmasola.

Abogado: “Hardy debía volver”

El abogado Franz Menacho señaló anoche a la red Unitel que Gómez debía retornar a Santa Cruz luego de haber cumplido una sanción disciplinaria en La Paz, pero que no se realizó porque las autoridades de Régimen Penitenciario manifestaban que no había recursos para hacer efectivo el retorno.

Romero recordó que “costó mucho” trasladar a Gómez hasta Chonchocoro. “No sé si el grupo de Hardy generaba terror y presión a los jueces”, dijo.

ANTECEDENTES

Tres casos anteriores

Aunque Hardy Gómez nunca ocupó un cargo como representante de los internos de Palmasola, se lo consideraba un ‘peso pesado’ en el penal, y su muerte se suma a la de tres exregentes del reclusorio cruceño que fueron victimados en Chonchocoro de La Paz.

2003: CHICHURIRU, AHORCADO
Mauricio Suárez Saucedo, alias ‘Chichuriru’, apareció ahorcado en su celda. Para la Policía fue victimado por otros reclusos, en medio de una disputa de poder. Estaba preso por robo agravado y secuestro.

2012: VINCHITA, ACUCHILLADO 
Apareció asesinado con múltiples heridas de cuchillo. Estaba condenado a 30 años por el crimen de Jéssika Borda, hija de la excónsul de Estados Unidos, Rhea Borda, ahora concejala.

2018: OTI, CON 20 PUÑALADAS 
Víctor Hugo Escóbar Orellana fue trasladado a Chonchocoro después de la intervención policial en Palmasola. Fue atacado en la cancha de la penitenciaría.

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