La muestra está instalada entre el séptimo y octavo anillo del cambódromo. Participan artesanos de Santa Cruz y de otros departamentos; muchos llevan más de medio siglo siendo parte de esta feria

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23 de septiembre de 2018, 4:30 AM
23 de septiembre de 2018, 4:30 AM

Llevarse algo pequeño para convertirlo después en algo grande y real para el hogar es una de las creencias y principales motivaciones para visitar y hacer compras en la feria de Alasita, donde más de 1.000 artesanos exponen una variedad de miniaturas que están al alcance de todo bolsillo.

Esta muestra se ha instalado entre el séptimo y octavo anillo del cambódromo y reúne a artesanos de Santa Cruz, La Paz, Cochabamba y otras regiones.

Melva Carrasco es paceña y con sus 72 años encima todavía sigue diestra para fabricar, en miniatura, heladeras, cocinas, juegos de ollas, garrafas y todo lo que tenga que ver con artículos para el hogar.

Comenta que hace 50 años que llega a la capital cruceña para exponer sus productos y que esta destreza la heredó de sus padres, que también eran artesanos. Doña Melva también participa de otras ferias, principalmente la que se realiza en enero en la ciudad de La Paz.

José L. Arze muestra un Cristo de mimbre, a Bs 30 E

Hilaria Bautista (65) es otra artesana que se destaca en la costura y que ofrece para la venta una variedad de prendas de vestir en molde pequeño. Uno de sus diseños que llama la atención son zapatos y botas que vende entre Bs 7, 8 y 10. Los detalles que tienen cada uno de sus productos son la mejor prueba de la dedicación para fabricar y buscar cómo surtir su puesto de venta.

Ramona Fernández (62) expone la ropa paceña en miniatura. Tiene trajes de aguayo, entre otras creaciones. El oficio artesanal lo heredó de su suegra, que se dedicaba a esta labor.

Cristina Tercero (59) llegó desde Cochabamba. Su puesto está cargado de miniaturas hechas en madera por sus propias manos. Cuenta que lleva más de 30 años haciendo estos trabajos y que recorre todas las ferias de Alasita que se hacen en las diferentes regiones del país. Ella hace desde pequeños cuchillos, trompos y hasta crayones rústicos para que los chicos puedan colorear.

Melva Carrasco y Ramona Fernández y sus miniheladera y cocina

Esperan aumentar las ventas

José Luis Arze Chávez, artesano que tiene una variedad de productos de mimbre, señala que desde Cochabamba llegaron 160 expositores, cada uno con sus propias mercaderías.

“Nos estamos moviendo para que la población cruceña se entere de que ya estamos instalados en el cambódromo”, comenta.

Arze, al igual que otros expositores, está preocupado, porque ha sido poca la gente que ha llegado hasta ahora a la feria de Alasita, pero espera que en este fin de semana largo la concurrencia mejore.

El trompo sale a Bs 2 y el cuchillito cuesta Bs 3

Martha Copa, que fabrica cinturones de cuero, coincide en que son pocos los visitantes que han llegado a comprar a la feria, por lo que invita a la población a que asista a pasear en familia y comprar miniaturas, adornos y utensilios para el hogar.

La Alasita también se adapta a los tiempos. María Aldana (61) vende alcancías con los diseños de los ‘emoji’ que son usados en mensajes electrónicos, los cuales cuestan entre Bs 10, 15 y 20. Hay también otras con detalles tecnológicos como los hashtag, para que la gente se lleve lo que le guste.