El fiscal departamental de Oruro, Mario Rocha, confirmó que hay una investigación abierta por los presuntos malos tratos en el centro. El gobernador dijo que no se está protegiendo a ninguna persona

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16 de octubre de 2018, 4:00 AM
16 de octubre de 2018, 4:00 AM

La llegada de una adolescente de 13 años al Hospital General de Oruro, la anterior semana, con el tabique nasal roto y ‘huellas’ de lesiones antiguas en el cuerpo, provocó la reacción de la Fiscalía, de la Gobernación de Oruro, de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, de la Dirección de Igualdad y Oportunidades (DIO) de la Alcaldía y de la Policía, que ahora tienen en la mira al centro de acogida donde se presume hay más víctimas de supuestos malos tratos.

Los primeros en intervenir en este caso fueron los funcionarios de la DIO, que al ser anoticiados sobre las condiciones en las que llegó la menor hasta el nosocomio la semana pasada, se constituyeron en el sitio para hacer una evaluación del caso y verificar la gravedad de las lesiones.

De acuerdo con la entrevista sicológica realizada a la menor, ella refiere haber sido agredida por una de las encargadas del centro, que es administrado por religiosas y personal civil. En el informe médico de la muchacha se establece que la menor tiene siete días de incapacidad, salvo complicaciones posteriores, y detalla que hay marcas en su cuerpo de lesiones antiguas, aunque no se refiere el tipo de acciones que las pudieron haber provocado.

EL DEBER visitó el centro de acogida para las menores y logró conocer la versión de la encargada, que indicó que muchas de las menores que están allí no quieren obedecer ningún tipo de normas y refirió que son las mismas las que provocan los problemas.

“Ellas nos amenazan con quejarse a los medios de comunicación cuando les llamamos la atención. Aquí no les podemos hacer nada, porque nos dicen que tienen derechos”, aseguró la responsable del centro, que ahora está bajo la investigación de diferentes instituciones.

Las autoridades

A raíz de los cuestionamientos que surgieron luego de la verificación sobre la situación médica de la menor, que aún continúa internada, el gobernador de Oruro, Víctor Hugo Vásquez, pidió a la prensa manejar este caso de manera responsable, “porque está en juego la estabilidad de las menores del hogar”.

“No estamos protegiendo a nadie, si alguien tiene pruebas, que las presente ante las autoridades”, afirmó Vásquez, ya que el Servicio Departamental de Gestión Social (Sedeges) trabaja de forma directa con el centro, que ahora está siendo cuestionado.

El fiscal departamental de Oruro, Mario Rocha, confirmó que hay una investigación en curso por lo ocurrido y que se realizaron algunas citaciones para determinar lo sucedido.

Finalmente la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, Otilia Choque, dijo que hay denuncias de malos tratos y aseveró que hay otras acciones irregulares que no han sido denunciadas.

Otros detalles

AUDIO DE LAS AGRESIONES
EL DEBER tuvo acceso a un audio donde se escuchan las supuestas agresiones que sufrieron las menores, material que ha sido requerido por las autoridades que investigan el hecho, para sumar elementos a las pesquisas.

SALIDAS SIN DENUNCIAS
La diputada Otilia Choque afirmó que también se indaga la posible salida irregular de las menores, acción que no habría sido denunciada por la encargada del centro.

EL ‘VICE’ VISITÓ EL CENTRO
Según la página web del periódico Cambio, Álvaro García Linera visitó el hogar a mediados de este año.

SE TRABAJA EN LA ELABORACIÓN DE AL MENOS TRES ÓRDENES DE DETENCIÓN POR LO OCURRIDO CON LA ADOLESCENTE

Se tuvo acceso a información, aún extraoficial, de que hay al menos tres órdenes de aprehensión en contra de funcionarios del centro de acogida para menores en situación de riesgo y que las mismas estaban siendo elaboradas por los investigadores, que encontraron indicios de posible culpabilidad en el caso de las agresiones en contra de la adolescente de 13 años internada en un hospital de Oruro.

La Fiscalía está indagando el caso en coordinación con agentes de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) de Oruro, que tiempo atrás ya recibieron una denuncia por las supuestas fugas de las menores del centro y que la misma encargada del hogar admite ocurrieron en la entrevista con EL DEBER, pero que aparentemente no habrían sido denunciadas a las autoridades.

Tatiana Moroco, responsable del DIO municipal, dijo que luego de conocer los informes sicológicos realizados a las menores en el centro, se remitieron los mismos a las autoridades jurisdiccionales que velan por la seguridad y la tutela de las menores, que en la mayoría de los casos son víctimas de abandono familiar o estuvieron viviendo en situación de calle.

Se espera para los siguientes días la visita de las autoridades al centro para hacer una inspección.

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