Los tres primeros casos de fiebre hemorrágica por Arenavirus del genotipo Chapare se detectaron entre diciembre de 2003 y enero de 2004, pero no se identificó al vector. Los afectados tuvieron síntomas febriles y cardiacos

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17 de julio de 2019, 4:00 AM
17 de julio de 2019, 4:00 AM

La fiebre hemorrágica por Arenavirus del Nuevo Mundo del genotipo Chapare, que ha afectado recientemente a cinco personas en La Paz, de las cuales fallecieron tres, tuvo su primer brote hace 16 años en una localidad rural de la zona del trópico cochabambino; sin embargo, desde entonces hasta la fecha no se ha logrado identificar al vector.

Se sabe que los Arenavirus son transmitidos por roedores, por eso las últimas investigaciones en el norte paceño, donde se reportó el caso primario (que ahora se conoce que es del genotipo Chapare), estuvieron dirigidas a la búsqueda del Calomys Callosus, transmisor del virus Machupo, pero también es posible que lo transmitan otras familias de roedores, aseguran entendidos.

El gerente de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Roberto Tórrez, recordó que el virus Chapare se identificó hace más de una década, después de que tres personas presentaran síntomas de fiebre hemorrágica en la comunidad rural de Samusaveti (trópico cochabambino), entre diciembre de 2003 y enero de 2004.

Los enfermos presentaron síntomas febriles y hemorrágicos, y, principalmente, problemas cardiacos. Las investigaciones dieron como resultado que se trataba de un virus “muy emparentado” con el Machupo, pero genéticamente distinto. En 2006 se le dio el nombre de virus Chapare, por la procedencia.

Tórrez explicó que el foco fue controlado, pero no se logró identificar al vector. Hasta ahora tampoco se sabe cómo es que el virus ha reaparecido en el norte paceño, aunque las posibilidades son que el vector haya migrado del trópico cochabambino o que haya estado habitando el norte paceño y que recién se hayan presentado personas infectadas. “Sabemos que es transmitido por roedores, pero ni en el virus Chapare original, de Cochabamba, ni en el reciente, de La Paz, se sabe cuál es el vector. Eso está en investigación, los biólogos hacen las pesquisas para dar con el vector”, dijo.

Santa Cruz, fuera de riesgo

El gerente de Epidemiología descartó que el departamento cruceño esté en riesgo de un brote, toda vez que “nunca se han registrado casos del mal y tampoco se han encontrado roedores de la familia Calomys Callosus, infectados con virus Machupo”.

A decir de Tórrez, hace muchos años, en San Ignacio de Velasco, en los límites con Piso firme, se hallaron roedores Calomys Callosus, con el virus Latino, que no es patógeno para el hombre.

Técnicos del Ministerio de Salud han capturado roedores en zonas de Caranavi y Guanay, donde vivía y estuvo trabajando el primer fallecido (el agricultor Macario Gironda). Como no se encontraron roedores Calomys, la investigación se amplió a otro tipo de ratones.

LA FISCALÍA CITÓ A DOS MÉDICAS POR MUERTE DE XIMENA CUÉLLAR
Nueve días antes de morir, es decir, cuando la estudiante de medicina Ximena Cuéllar estaba internada, la directora del hospital, Adela Limachi, y la jefa de Internado de Caranavi (La Paz), Raquel Ticona, fueron informadas de la gravedad de su estado de salud y desde entonces, indican que se siguieron todos los protocolos para intentar salvarle la vida. Esa fue la declaración que ambas profesionales prestaron en la Fiscalía.

Tanto Limachi como Ticona han sido acusadas de homicidio culposo por Martha Alípaz (madre de Ximena Cuéllar) y la Asesoría Legal de la UMSA. Ambas profesionales son sindicadas de haber cometido negligencia contra la vida de Ximena, cuando la obligaron a trabajar a pesar de su grave enfermedad, según la denuncia.

“Las personas acusadas señalan que tuvieron conocimiento cuando fue internada la residente, el 27 de mayo. Supuestamente, desde ahí se tomaron todas las previsiones, según señalan en su defensa”, informó el fiscal asignado al caso, Heisman Maldonado.

Cuéllar murió el 4 de junio. Primero se dijo que contrajo dengue, pero luego el Ministerio de Salud constató que su deceso se produjo por Arenavirus. Según la denuncia de la madre, en Caranavi, a su hija la dejaron agonizar y no le brindaron atención médica por ocho días.