Unos 400 inmuebles tienen letreros donde se lee: “En venta” o “Se alquila”. Entre las propuestas para revitalizar la zona están flexibilizar requisitos para casas patrimoniales, una nueva categorización, etc.

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25 de agosto de 2019, 15:00 PM
25 de agosto de 2019, 15:00 PM

En la calle 24 de Septiembre y esquina Arenales hay un inmueble que tiene siete tiendas, pero tan solo una está ocupada, las restantes lucen un letrero donde se lee: “en venta”. En realidad, todo el inmueble catalogado como Edificación de Interés Ambiental, está a la venta.

Cruzando la calle, a unos pasos donde la calle Arenales se convierte en Florida, hay un edificio completo en venta. Tiene un gran letrero y parece estar deshabitado. Justo al lado hay otro inmueble que tiene dos casetas comerciales, a la espera de que alguien los alquile. Sin ir más lejos, en el otro lado de la plaza 24 de Septiembre, en la esquina de las calles Chuquisaca y Ballivián, hay una joyería que expone cuatro letreros donde se indica que el inmueble está en venta. Al ingresar las trabajadoras explican que ya tienen dos sucursales en dos malls de la ciudad, aunque prevén continuar en el centro, pero en un inmueble más pequeño.

En el otro lado de la plaza principal, en la calle Velasco, a lo largo de cuatro cuadras hay al menos 10 negocios en venta o en alquiler. Esta es una calle caracterizada por contar con varios comercios, pero también es donde hay más tiendas en venta o en alquiler. Por ejemplo, en la esquina, al frente de la iglesia San Roque, hay un pequeño negocio en alquiler.

Siguiendo la misma calle, hay una tienda vacía donde antes funcionaba una agencia de viajes. Ahora el espacio está en alquiler.

Sobre la misma Velasco, casi esquina Mercado, hay una tienda amplia, en el lugar antes se vendía ropa de bebés, pero desde hace algunas semanas solo hay cartones en los vidrios. Un letrero dice: “Nos trasladamos a...” y se cita un centro comercial.

Según un “censo” realizado hace tres semanas por la Asociación de Propietarios del Centro (APCCruz), dentro del primer anillo hay 400 inmuebles, entre casas y casetas para negocios, que están en venta o en alquiler. Similar trabajo realizaron en 2015 y en aquella ocasión contaron 100 sitios.

El representante de esta organización, Guido Landívar, señaló que el problema de despoblamiento comenzó hace cuatro años y se fue agudizando en los últimos años. “El centro atraviesa el peor momento. Prácticamente cada día hay un nuevo negocio en alquiler o en venta”, explicó.

Los terrenos de parqueo no se salvan de esta situación. Cerca de la catedral cruceña hay tres en venta. Uno está en la calle Warnes, casi esquina René Moreno. En un sondeo, los vivientes, propietarios de negocios y urbanistas reconocen que el problema de despoblamiento del centro se agudizó aún más los últimos años.

Una propietaria de inmueble de la zona, Cleidy Gallegos, señaló que su padre vive de alquileres de tiendas y comprobó que los negocios solo están en el centro por tres meses y luego, por la falta de movimiento económico, terminan retirándose.

Para el presidente de la Asociación Impulsora del Centro Histórico, Guillermo Moscoso, cada vez hay menos personas viviendo en el corazón de Santa Cruz de la Sierra debido a varios factores, como el exceso de vendedores ambulantes, falta de seguridad y poca iluminación en algunas calles. “Todo esto afecta a la valoración del precio de los inmuebles y a su uso porque hay menos demanda de compra y los precios bajan”, puntualizó.

EL DEBER observó que son pocos los negocios que abren en el centro de la ciudad. En las cuadras próximas a la plaza hay tres nuevas alternativas nocturnas y en los próximos días abrirá una cadena internacional de venta de café, justo frente a la plaza principal.

La docente universitaria y asesora de temas urbanos, Marina Bonino, explicó que todos los centros de las ciudades sufren transformaciones en el tiempo y en el caso de la capital cruceña estas se fueron agudizando con la apertura de los malls.

Para Bonino, con apoyo de los vivientes se puede reinventar la zona con iniciativas como: mejores parqueos, facilitar la circulación peatonal y vehicular, mejores condiciones fiscales para inmuebles, recuperación de espacios públicos, entre otras.

“Hay ciudades que ya pasaron por este proceso con sus centros históricos. Lamentablemente, a veces se tiene que llegar a una situación límite para cambiar de perspectiva y encarar las dificultades de forma eficiente. Se puede revertir todo esto”, resaltó.

 

Reducción del transporte

Los integrantes de APC-Cruz ven con buenos ojos la iniciativa anunciada por la Alcaldía de reducir el ingreso de micros al centro de la ciudad. Guido Landívar señaló que tienen esperanza de que con esa medida disminuya el caos vehicular en la zona y que más vehículos particulares, con visitantes, ingresen a la zona. “Los fines de semana, los micros pasan casi vacíos, son muy pocos los pasajeros que se bajan en el centro porque es un zona de paso”.

Según la Secretaría Municipal de Movilidad Urbana, actualmente al centro de la ciudad ingresan 115 líneas, lo que significa que cada hora son al menos 2.000 micros que pasan por el lugar. La proyección es reducir el 65% de estos y redireccionarlos a otras rutas.

Moscoso explicó que este tema se debería tratar con cuidado porque la reducción de líneas y la definición de canales exclusivos para el BRT pueden afectar a la zona céntrica. “Se necesita que el municipio presente ideas innovadoras. Necesitamos que más personas ingresen al centro, que las calles sean de uso múltiple y si se reducen los micros hay riesgo de que los negocios del primer anillo se vean afectados económicamente”, expresó.

 

Actividad nocturna

José Luis Ortiz, del local Caminito, reconoció que la actividad comercial diurna disminuyó debido a la preferencia de la población a otros centros comerciales como los malls o shopping y a las facilidades que estos ofrecen: parqueo gratuito, patio de comidas y mayor oferta de entretenimiento (cine). Sin embargo, resaltó que en la noche el centro renace por los locales nocturnos. No obstante, cree que en horario diurno y nocturno es necesario tener un mejor control del tráfico vehicular para que la ciudadanía pueda pasear y circular tranquilamente.

Para Ortiz, si se invirtiera en mejorar la cara del casco viejo (iluminación más romántica, fachadas pintadas, menos cables visibles) se podría potenciar mucho más el atractivo del centro citadino, ya que cuenta con plazas, museos, galerías de arte, cafés, cine, pubs, discotecas, espectáculos callejeros y espacio abiertos. Todo esto lo convierte en un atractivo circuito cultural, gastronómico y de entretenimiento nocturno que los cruceños y no cruceños sabrán apreciar.