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14 de septiembre de 2019, 4:00 AM
14 de septiembre de 2019, 4:00 AM

A 36 días de las elecciones presidenciales, los incendios que afectan desde julio a gran parte del departamento de Santa Cruz, más los actos violentos que dejaron heridos, detenidos y destrozos materiales en varios sectores de esta capital, obstaculizan el normal proceso de una elección crucial.

Estas trifulcas, con severas acusaciones de un bando y de otro, tienen la antesala de una sesión en el Comité Pro Santa Cruz de candentes discursos y diversas acusaciones, de uno y otros sectores, que enaltecieron los ánimos a punto de llegar a hechos violentos.

Horas antes se conoció una encuesta hecha por el sistema universitario a la cabeza de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) en La Paz, que antes de salir a la luz observó el Tribunal Supremo Electoral y evitó que sea publicada por los grandes medios.

De campaña nada, o más bien, de campaña todo. Mucho humo por acá y la Chiquitania sigue ardiendo.

Que los dedos de los pirómanos se quemen, que la lluvia los embarre y no puedan dar un paso más. Que los médicos dejen el paro y se acuerden de los pacientes, que enfermos y aun pacientes esperan la mano santa que les alivie el dolor y la angustia.

Que los políticos se dediquen a servir y mejorar la vida democrática y que los deportistas se acuerden de ganar. Que llueva café y diluvie (agua) en el campo, que la pausa ambiental sea para siempre y que los deseos se hagan añicos y rompan el cristal para hacerse realidad, de una vez por todas

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