Opinión

Cotas, una empresa tecnológica

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2 de abril de 2019, 4:00 AM
2 de abril de 2019, 4:00 AM

Un dirigente sindical de COTAS, muy suelto de cuerpo, ha declarado recientemente a los medios de prensa, que la cooperativa es “una empresa tecnológica” para justificar (algo que es injustificable) el derecho que tienen “sus técnicos” de percibir jugosos salarios. Con el destape de la defraudación de 7.7 millones de dólares, mal contados, la jefatura de personal se vio conminada por los socios a publicar su planilla mensual de sueldos y salarios, la misma que arrojó más de un millón de dólares sin considerar, nos informa el mencionado dirigente, que dicha planilla ha sido “readecuada” en perjuicio de los trabajadores que aceptaron, por la necesidad de conservar el empleo, el recorte de su ingreso en un 50%, lo que quiere decir que antes el monto de la planilla era de mayor cuantía (ver infografía de EL DEBER, A3, 14/3/2019).

Sin embargo, el gran destape, ha permitido conocer que el sueldo máximo es de Bs. 52.000 y corresponde al presidente de la entidad, aunque ciertos dirigentes sindicales declarados en comisión perciben un salario de Bs 60.000. Cada uno de ellos gana mucho más que el presidente Morales, claro que sin contar cartas y espadas. Es de imaginar que tales dirigentes, con el doble aguinaldo, acostumbran a pasar una feliz Nochebuena, un bienaventurado Año Nuevo y un próspero Carnaval. Son los únicos jerarcas que disfrutan la panacea del “vivir bien”, proclamado por el Estado Plurinacional. Son gajes de la declaratoria en comisión, conquista ad perpetuam de la aristocracia sindical del país, mientras que el proletariado tiene que romperse el lomo para subsistir con el salario mínimo vital.

Recién a estas alturas de los acontecimientos, el Consejo de Vigilancia se acuerda de ‘vigilar’ y ha dicho que aplicará una “reingeniería total en la Cooperativa”, pero los socios presienten que tal reingeniería, no es más que un alibí o coartada para acallar las voces que están pidiendo la renuncia no solo de este Consejo, sino también del Consejo de Administración y otros altos ejecutivos, por ser corresponsables de haber dejado abandonados a los socios a la voracidad de los amigos de lo ajeno. En buen romance: dejaron al zorro libre y al cuidado de las gallinas. Si fuera cierto que COTAS está administrada por Los Caballeros del Oriente, habría que ver lo que estarán haciendo los Toborochis con las otras cooperativas, porque, cuando el río suena…

Y habrá que darle la razón al dirigente sindical de marras, porque se requiere tecnología de punta y mucha ciencia para jugar con los guarismos como lo hicieron; para haber disfrazado de asistencialismo social lo que era un vulgar e ilícito negocio comercial de unos cuantos funcionarios, supuestamente encargados de los controles internos, y por haberla expuesto a una inminente intervención externa con riesgo de perder su personería. Fueron tan ‘tecnológicos’ que hicieron desaparecer en el mercado negro lo que se considera ‘cuerpo del delito’(léase televisores, computadoras, etc.). Ahora, todo está en la habilidad de los abogados defensores, ilusionistas del derecho, que harán todo lo que está a su alcance para conseguirle a cada encausado (léase cleptómano de cuello blanco), un juicio abreviado y una pena benevolente que les permita gozar en libertad del producto del latrocinio. “El fuero para el gran ladrón-decía con amargura Pablo Neruda-, la cárcel para el que roba pan”, o para el roba garrafas, agregamos nosotros. Los únicos que estarán haciendo ‘pilatos’ para verlos libres cuanto antes, son sus amigos que pagaron solicitadas en los diarios abonando sus intachables antecedentes, y los estarán esperando en la ‘frater’ para estrechar lazos y compartir como es habitual el churrasco de los viernes.

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