Cara a cara...
Se libra una suerte de competencia por la salud. Los que mandan en los diferentes niveles de gobierno quieren demostrar quién atiende mejor a los bolivianos, una tarea que estuvo descuidada por tanto tiempo en Bolivia, relegada a último plano cuando se priorizaba la inversión de recursos públicos en cemento y en césped sintético para canchas. No obstante, ¡enhorabuena por la etapa preelectoral! Que los políticos en el poder utilicen el dinero en medicamentos, equipamiento de hospitales y también en ítems. Que de algo sirva esta carrera despiadada por el poder.
Un apagó en Venezuela no solo causó colapso en viviendas y oficinas, también en hospitales. Hubo víctimas mortales porque los equipos médicos dejaron de funcionar. En medio del caos, ayer hubo represión a la marcha opositora convocada por Juan Guaidó, mientras los chavistas intentaban mostrar fuerza en otras vías. En tanto eso ocurre en este sufrido país, aumentan los venezolanos que buscan trabajo o piden ayuda en las rotondas de nuestra ciudad. ¡Cuánto dolor es capaz de causar la ambición!
Las salteñas, las humintas, el arroz con queso, el picante de pollo, el majadito y el chuño destacan entre las comidas más populares de Bolivia, a escala mundial. El nuestro es un país con una variada gastronomía que tendría que ser incentivada y promocionada por el Estado. Entre lo que comemos y los hermosos lugares que tenemos para visitar, hay un potencial turístico dormido que, a falta de incentivo gubernamental, merece la atención de empresarios visionarios y emprendedores.
¡Hasta el año Carnaval! Se acaba la fiesta grande. Que la celebración de esta jornada sea con más alegría que borrachera. Es posible divertirse sin nublar la conciencia.