Opinión

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24 de febrero de 2018, 4:00 AM
24 de febrero de 2018, 4:00 AM

Las redes y la política. El presidente Evo Morales ha confesado que lo atacan con la democracia al exigirle que respete el resultado del referéndum del 21-F de 2016, en el que la mayoría dijo No a la reelección presidencial. Tildó de privatizadores a los protagonistas de la jornada de protesta del miércoles. "Podemos repasar el pasado de los partidos políticos. Algunos son herederos del Plan Cóndor, alumnos de la dictadura de Banzer y aliados de las dictaduras", acusó. El jefe del MAS se resiste a reconocer que, así como él dice que inició un proceso de cambio, existe una nueva realidad ciudadana en el país que se autoorganiza y autoconvoca por la plataforma digital, un invento que está dejando en desuso las tradicionales prácticas políticas partidistas. Ya es un hecho que la esperanza del nuevo liderazgo en Bolivia está en una generación libre del prebendalismo que emerge en plataformas y colectivos conectados en la vida virtual, dejando atrás partidos, agrupaciones, organizaciones e instituciones dominadas por pequeños intereses.

 

Paciencia por el Urubó. El caos y el desorden del tránsito de vehículos causados por la refacción del único puente que da paso al Urubó son una muestra de que las autoridades no priorizan las necesidades urgentes de la ciudadanía que los elige. Ni modo, los vecinos que utilizan esa vía tendrán que armarse de paciencia y tener la máxima precaución para evitar inconvenientes.

 

Es fútbol. La resonante victoria de Destroyers ante Oriente (3-1) el jueves deja en claro que en el fútbol, muchas veces, no pesan ni el favoritismo ni las estadísticas.

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