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11 de junio de 2018, 4:01 AM
11 de junio de 2018, 4:01 AM

Un valioso documental de CNN ha ratificado las irregularidades en las operaciones de LaMia que voló al límite, antes de la tragedia del Chapecoense. Uno de los datos más delicados de esta investigación, liderada por el periodista Francho Barón, es que un exfuncionario boliviano identificado como Luis Coimbra se resistía a la otorgación de la licencia a la aerolínea porque no cumplía algunos requisitos. Sin embargo, fue destituido el 7 de julio de 2015 y su sucesor la habilitó 24 días después. Este es un importante filón para determinar si alguien con poder le permitió funcionar en Bolivia, después de constituirse como empresa solo con 20 mil dólares. Es el punto de partida además para determinar quién era su dueño real y cuáles sus nexos.

El venezolano Ricardo Albacete, que negó después de la tragedia ser propietario de LaMia, aparece en el documental para ratificar que solo era amigo de los accionistas bolivianos de la aerolínea. Sin embargo, el informe de CNN mostró facturas firmadas por su hija Loredana y testimonios que lo vinculan presuntamente con la propiedad. Incluso el documental identifica a un chino, indagado por corrupción, que supuestamente hizo aportes millonarios para el mantenimiento de las naves. Suficiente como para que los fiscales y jueces convoquen a declarar a estas personas.  

La nave de LaMia voló al menos diez veces sin seguro y algunas con combustible limitado en tres países, con nueve equipos y tres selecciones, entre ellas la de Messi. Las falencias de los controles se dieron más allá de Bolivia y urge investigar cómo y porqué LaMia consiguió tanta tolerancia en la aeronavegación civil y tantos contratos en el mundo del fútbol. 
 

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