Piñera y Sánchez mantuvieron una reunión en el Palacio de la Moneda con motivo de la visita del jefe de Gobierno a Chile, primera parada de su gira latinoamericana

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28 de agosto de 2018, 8:51 AM
28 de agosto de 2018, 8:51 AM

El jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el presidente de Chile, Sebastián Piñera, ratificaron este martes la alianza de colaboración en todos los ámbitos entre sus países y demandaron una solución para la crisis que vive Venezuela.

Piñera y Sánchez mantuvieron una reunión en el Palacio de la Moneda con motivo de la visita del jefe de Gobierno a Santiago de Chile, primera parada de su gira latinoamericana, que le llevará también hasta el viernes a Bolivia, Colombia y Costa Rica.

El presidente chileno, en conferencia de prensa conjunta, dijo que confía en que la relación entre los gobiernos de los dos países permita que las mejores páginas de su relación bilateral sean las que se escriban en el futuro y pueda seguir fortaleciéndose la colaboración en diversos asuntos.

Entre ellos, una actualización del acuerdo de Chile con la Unión Europea y ante la que Sánchez se ha comprometido a ser "un gran aliado".

También defendió más colaboración en materia de educación o ciberseguridad y para conseguir sociedades más dinámicas ante los retos tecnológicos.

Unas apreciaciones con las que coincidió totalmente el jefe del Gobierno español.

Sánchez consideró que todas las sociedades demandan de sus gobernantes la justicia económica, que no puede haber crecimiento si no se redistribuye y se ha de luchar contra la desigualdad social.

Ante ello, dijo que son necesarios "liderazgos cooperativos" porque sólo desde la colaboración cree que se podrá dar una respuesta eficaz a los problemas de la sociedad.

En ese contexto, destacó que Europa y Latinoamérica comparten el desafío de la integración y que afecta de lleno al problema de la migración, ante el que volvió a defender una respuesta común europea.

Sánchez elogió la acogida del Gobierno de Chile a muchos venezolanos ante la situación en su país.

Venezuela estuvo muy presente en la reunión y en la conferencia de prensa, en la que el jefe del Gobierno español abogó por acompañar, junto a la comunidad internacional, un diálogo interno entre venezolanos para que resuelvan la crisis de su país, pero sin injerencia directa en la política interna.

"Venezuela tiene que abrir un diálogo consigo mismo, entre venezolanos, para encontrar una solución a esta crisis política, la comunidad internacional debe acompañar ese dialogo y dentro de ese comunidad internacional España estará de forma activa", añadió Sánchez.

Consideró que "lo importante es no olvidarse de los venezolanos", tanto de aquellos que están emigrando como consecuencia de la "crisis económica, política y social" como de aquellos que se quedan en su país.

Casi 147.500 venezolanos han emigrado a Chile en los primeros siete meses de este año, lo que convierte a este país en el cuarto destino en Sudamérica para los que huyen de la crisis en Venezuela.

Piñera afirmó que Venezuela vive una grave crisis humanitaria y que Chile mantiene su compromiso de colaborar para que ese país "supere su crisis" y "recupere su libertad, su democracia, el estado de derecho y (el) respeto a los derechos humanos".

En ese sentido, dijo que España "tiene un rol importante que jugar para resolver problemas de América Latina" y el de Venezuela en particular.

Durante su comparecencia, Sánchez se dirigió a los españoles residentes en Chile para ratificar su compromiso de modificación del denominado "voto rogado" ya que cree que dificulta la participación de los emigrantes españoles en los procesos electorales que hay en España.

"El Gobierno va a hacer todo los posible para acabar con el voto rogado, y quiero pedir a los grupos parlamentarios que lleguen a un acuerdo para que se modifique la ley de voto exterior", añadió.

Piñera, que agradeció a Sánchez que eligiera a su país como el primer destino al que viaja como presidente fuera de la UE, bromeó sobre el aspecto físico del presidente del Gobierno asegurando que se le nota en la cara que sólo lleva dos meses en su cargo.

"Cuando termine su mandato va a poder ver que gobernar es una actividad muy motivante, pero muy difícil y que deja huellas, pero vale la pena", añadió.

El presidente chileno y el jefe del Gobierno español abordaron otras cuestiones como la próxima cumbre iberoamericana, que se celebrará en noviembre en Guatemala.

Sánchez pidió a Piñera que acudiera y el presidente chileno garantizó que hará todos los esfuerzos para ello aunque avanzó las dificultades que existen por su cercanía con la cumbre Asia-Pacífico.

El presidente del Gobierno culminará mañana su viaje a Chile con una reunión con empresarios españoles presentes en este país, sendas entrevistas con los presidentes del Congreso y el Senado chilenos, una visita a la casa de Isabel Allende y una recepción a la colectividad española.