Un juez de California ordena la reunificación de familias separadas tras su detención en la frontera. En el Congreso naufraga el proyecto de ley del oficialismo que limitaba la reunificación familiar de los migrantes indocumentados. Crece el debate en EEUU

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28 de junio de 2018, 4:00 AM
28 de junio de 2018, 4:00 AM

La política antiinmigrantes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sufrió ayer una doble derrota: un tribunal de California ordena la restitución de las familias de inmigrantes separadas y, en el Congreso, naufragó el proyecto oficialista para una reforma migratoria.
La Cámara de Representantes de EEUU rechazó de forma tajante la propuesta de ley migratoria impulsada por el liderazgo republicano, mostrando una vez más la división interna de los conservadores respecto a este asunto.

Con 121 votos a favor y 301 en contra, los republicanos se mostraron de nuevo incapaces de proponer un texto legislativo que convenza tanto a sus correligionarios como a los demócratas para solucionar el problema de los jóvenes indocumentados, atajar la separación familiar y además fortalecer la seguridad en la frontera.

La propuesta planteaba un camino a la ciudadanía para 1,8 millones de jóvenes sin papeles, conocidos como “soñadores”, prohibía la separación familiar en la frontera, pero a la vez limitaba la reunificación familiar de los inmigrantes legales y concedía 25.000 millones de dólares para la construcción del muro con México.

A pesar de que el presidente Donald Trump dio su apoyo al texto “in extremis” durante la mañana de ayer, el liderazgo republicano fracasó tras semanas de negociaciones con su ala más moderada.

No obstante, pese a la derrota, el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, logró el principal de sus objetivos: frenar que demócratas y centristas forzaran un voto en el pleno sobre este asunto mediante una maniobra legislativa.

Restitución de familias

En tanto, un tribunal de San Diego, suroeste de Estados Unidos, ordenó la reunificación de las familias de inmigrantes separados por la policía migratoria, denunciando la política de “tolerancia cero” impuesta por el gobierno de Donald Trump.

A no ser que representen un peligro para sus niños, los padres deben de ser reunidos con ellos en un plazo de dos semanas para los menores de cinco años y en menos de 30 días para los otros niños, según dictamina la sentencia judicial.  El fallo demanda además al gobierno que “haga frente a las caóticas circunstancias que ha creado”.

La demanda había sido presentada por la asociación de derechos cívicos ACLU en nombre de migrantes anónimos contra la policía de inmigración (ICE), a la cual el juez Dana Sabraw le exige asimismo “hacer todo para facilitar la comunicación” entre las familias separadas.  

La ACLU celebró en un comunicado y en Twitter la decisión judicial a la que calificó como una “enorme victoria para los padres y los niños que pensaban que nunca iban a volver a verse”.