El presidente Evo Morales está rumbo a Bogotá para participar del acto de cambio de mando. Un atentado de un grupo disidente de las FARC ha aumentado la tensión

El Deber logo
7 de agosto de 2018, 10:01 AM
7 de agosto de 2018, 10:01 AM

Colombia estrena gobierno este martes. El derechista Iván Duque llega al poder empeñado en endurecer la política de paz de su antecesor y en asfixiar diplomáticamente al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela.

Abogado de 42 años y delfín del influyente exmandatario y senador Álvaro Uribe -investigado por la Corte Suprema-, Duque jurará al cargo para el que fue elegido por cuatro años el 17 de junio, tras vencer a la izquierda en segundo turno. 

Duque sucederá al impopular Juan Manuel Santos, con quien inició su vida pública pero del que se apartó luego hasta convertirse en duro adversario, siempre de la mano de Uribe.

El nuevo presidente asume en medio de un clima tenso, tres ataques de las disidencias de las FARC en el departamento colombiano del Cauca, en el suroeste del país, dejaron un policía muerto y cinco heridos a pocas horas de que asuma el cargo.

En el municipio de Padilla el saldo fue de un uniformado muerto y tres más con lesiones luego de que detonara una motocicleta que fue cargada con explosivos.

La paz es el reto

Aunque contará con mayoría en el Congreso, el exsenador enfrenta un difícil arranque de mandato y a una oposición que prepara protestas de bienvenida este mismo martes.

Cuarta economía de América Latina, Colombia está en una delicada fase de implementación de los compromisos que firmó con las FARC -la poderosa guerrilla convertida en partido-, al tiempo que afronta varios focos de violencia financiada por el narcotráfico. 

Los narcocultivos treparon hasta 209.000 hectáreas en 2017, su máximo histórico.  

Además del futuro de la paz, "la situación de su mentor, el expresidente Uribe, y las relaciones con Venezuela son precisamente puntos claves" del inicio de la gestión, señala a AFP Diana Avellaneda, politóloga de la Universidad Javeriana.

Con el regreso del uribismo al poder, Colombia fortalece el bloque de derecha en la región tras los triunfos en Argentina, Chile y Perú, y con la expectativa de que se sume Brasil en los comicios de octubre. Nueve presidentes asistirán a la asunción de Duque.

Evo participará del acto

El presidente de Bolivia, Evo Morales, viajó hoy a Bogotá para participar en la investidura del nuevo gobernante de Colombia, Iván Duque, con la esperanza de que continúen los acuerdos de paz en ese país.

"Vamos a seguir apostando para la paz en Colombia, hemos hecho esfuerzos desde Cuba, Venezuela", declaró Morales a los medios antes de subir al avión.

Morales partió desde la Segunda Brigada Aérea en la ciudad central de Cochabamba, acompañado por el canciller del país, Fernando Huanacuni, y la ministra de Comunicación, Gisela López.

"El hermano (Juan Manuel) Santos, presidente saliente, me pidió que visitara y por eso decidimos ir a Colombia", indicó Morales.

El mandatario boliviano sostuvo que es un "derecho" que haya presidentes de derecha y de izquierda y que los pueblos son los que eligen a sus mandatarios.

Además, escribió en su cuenta oficial de Twitter que le desea al nuevo gobernante colombiano "los mayores éxitos en su gestión".

"Anhelamos que se continúen implementando los acuerdos de paz y se siga avanzando en la reconciliación que merece el hermano pueblo de Colombia", escribió Morales.

El presidente de Bolivia es parte de la decena de jefes de Estado que asistirán a la investidura de Duque y la vicepresidenta, Marta Lucía Ramírez.