La mujer sufría en la camilla a la espera de que su hija nazca, alrededor todo era fiesta: eran los últimos minutos de 2018 y los médicos, enfermesas y asistentes habían logrado manipular el parto para que la bebé no salga del vientre materno hasta que llegue el nuevo año. Todo fue filmado por los propios participantes de la fiesta. 

El hecho sucedió en el hospital Roosevelt de Guatemala, que se convirtió en el escenario del particular hecho, que generó indignación en  redes sociales. ¡Seis, cinco, cuatro, tres, dos, uno!", gritaron los médicos antes de que, finalmente, se produjera el parto. "Es una niña".

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A pesar de las críticas a los médicos del hospital, por el supuesto caso de 'violencia obstétrica', la madre de la bebé no realizará acción alguna y más bien agradeció la atención de los galenos del centro de salud, donde también dio a luz a sus anteriores hijos, según publica el diario Prensa Libre.