Las investigaciones apuntan a que los ataques se produjeron como represalia a lo sucedido en dos mezquitas en Nueva Zelanda, que provocó 50 fallecidos en marzo

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24 de abril de 2019, 4:00 AM
24 de abril de 2019, 4:00 AM

El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó ayer la serie de atentados coordinados que causaron al menos 321 muertos el domingo en Sri Lanka, que ayer rendía un emotivo homenaje a las víctimas.

“Los autores de los ataques contra los ciudadanos de los países de la Coalición [anti-EI] y los cristianos en Sri Lanka de anteayer son combatientes del EI”, anunció el grupo yihadista a través de su agencia de propaganda Amaq.

Se trata de los ataques islamistas más sangrientos en el sur asiático, tras los cuales el Gobierno decretó el estado de emergencia. Entre las víctimas hay al menos 45 niños y adolescentes, entre ellos un bebé de 18 meses, anunció la ONU en Ginebra.

Los primeros datos de la investigación revelan que dos hermanos esrilanqueses musulmanes, hijos de un rico comerciante de especias, tuvieron un papel clave en los atentados.

El primer ministro, Ranil Wickremesinghe, afirmó que había más individuos involucrados y que es posible que cometan más atentados. 

“Es una posibilidad, nosotros no hemos descartado nada. Estamos intentado detener a quienes huyeron”, destacó. 

Represalia

El ministro esrilanqués de Defensa, Ruwan Wijewardene, aseguró que “lo que ocurrió en Sri Lanka fue en represalia por los atentados contra los musulmanes de Christchurch”, donde el 15 de marzo murieron 50 musulmanes en dos mezquitas neozelandesas.

Millones de habitantes de la isla observaron ayer tres minutos de silencio a las 8:30, hora en que estalló la primera bomba, activada por un kamikaze en la iglesia católica de San Antonio de Colombo.

El lunes se descubrió cerca de allí otro artefacto explosivo que estalló antes de que pudiera ser desactivado.