Los kirchneristas denuncian que se busca inhabilitar la candidatura a la Presidencia de CFK. Los oficialistas exigen levantar los privilegios para que sea investigada. El juez Bonadio tiene vía libre para sus indagaciones

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23 de agosto de 2018, 4:00 AM
23 de agosto de 2018, 4:00 AM

El Senado argentino autorizó ayer por unanimidad el allanamiento de las tres residencias de la expresidenta Cristina Fernández, un paso más en la causa judicial que investiga millonarios sobornos para adjudicar contratos de obra pública.

La votación fue afirmativa por parte de los 67 senadores presentes en la sesión, incluida la propia Cristina Fernández. No hubo abstenciones.

El pedido de allanamiento había sido solicitado por el juez Claudio Bonadio y requería la votación en el Congreso, pues la exmandataria (2007-2015), elegida senadora en 2017, está amparada por fueros parlamentarios.

La sesión se prolongó durante seis horas, con intervenciones de 24 senadores.

“La comunicación (sobre la autorización) al juez Bonadio -que ya firmé- será entregada a primera hora de mañana (hoy)”, tuiteó tras la votación la vicepresidenta y titular del Senado, Gabriela Michetti.

En su discurso, Kirchner reiteró que el proceso en su contra tiene como motivación apartarla de la política.

“Si algo faltaba para consagrar la persecución política en Argentina era esta causa. Voy a ser la primera senadora allanada”, aseveró. Debido a sus fueros, Kirchner no puede ser detenida, pero se la puede imputar y condenar.

La semana pasada, una sesión en el Senado para evaluar el pedido de Bonadio, había fracasado por falta de cuórum.

Frases con ironía, sentido del humor y gran vehemencia protagonizaron ayer la sesión en el Senado argentino.

“¡Por favor! ¡Hay más imaginación que Walt Disney!. En la Justicia, la política y los medios. ¿Ustedes creen que esto no se va a dar vuelta? ¿Creen que esta payasada no les va a tocar a ustedes alguna vez?”, clamó ante los legisladores María Inés Pilatti Vergara, senadora del bloque capitaneado por la exmandataria.

Esos registros persiguen buscar pruebas en una causa en la que se la acusa de recibir millonarios sobornos de empresarios de la obra pública durante los gobiernos kirchneristas.

“Excavaciones, escaneos de paredes en apartamentos vecinos... Bonadio, ¡escanéate la cabeza!, en una de esas nos encontramos con que te queda una neurona de sensatez republicana”, remató Pilatti, al criticar medidas dispuestas por el juez y también que, en un programa televisivo, una vecina de Fernández mostrase al detalle su apartamento porteño para enseñar cómo sería el de la expresidenta.

Mientras, sus correligionarios más próximos la defendían en sus intervenciones -Nancy González alertó de que se persigue y se busca proscribir a Fernández como ya se hizo con Juan Domingo Perón y su esposa Evita-, otros miembros del oficialismo o la oposición avalaron que se dé el visto bueno a la solicitud del juez Bonadio.

 

Un alto funcionario de Macri vende sus acciones en farmacity tras sospechas de otorgar beneficios

El secretario de la Coordinación Interministerial de la Jefatura de Gabinete argentina, Mario Quintana, vendió todas las acciones que poseía de Farmacity, empresa que posee una red de farmacias, tras las sospechas de que había sido beneficiada por el Poder Ejecutivo.

Quintana “vendió la totalidad de las acciones que poseía de Farmacity, tanto en forma directa como indirecta, el 15 de agosto” y cumplió así con el “compromiso público que había asumido meses atrás, según el cual vendería la totalidad de su participación accionaria antes de fines de 2018”, informaron desde la Jefatura del Gabinete en una nota de prensa.

Asimismo, explicaron que las acciones “fueron adquiridas en su totalidad por los otros accionistas de la empresa”.

Quintana dirigió la empresa hasta poco antes de asumir como vicejefe de Gabinete del Gobierno de Mauricio Macri, a finales de 2015.

El 8 de junio, un fiscal pidió que se abriera una investigación para determinar si la red de farmacias que fundó y dirigió Quintana fue beneficiada como proveedora del organismo público que brinda servicios de salud a los jubilados. Farmacity emplea a unas 6.000 personas y cuenta con 305 sucursales, de las cuales 241 son farmacias y el resto, otros formatos comerciales.