Un joven de 36 años identificado como Benjamin Herman es el presunto autor y ya lo han neutralizado. La Fiscalía investiga el caso como un supuesto "acto terrorista"

El Deber logo
29 de mayo de 2018, 9:08 AM
29 de mayo de 2018, 9:08 AM

El pánico y el horror ante un nuevo atentado terrorista han regresado este martes a Bélgica. Un tiroteo ocurrido en la ciudad belga de Lieja ha dejado cuatro muertos y dos heridos. Se trata de dos policías, una tercera persona que transitaba por el lugar de los hechos en un coche y el atacante, identificado como Benjamin Herman y que ha sido abatido posteriormente por agentes de la policía.

Varios testigos citados por medios de comunicación belgas, aseguran que el joven habría gritado Allahu Akbar (Alá es grande). La Fiscalía de Lieja han confirmado que investigan lo ocurrido como un “acto terrorista”, según EL Periódico.

Según los elementos desvelados este mediodía por el fiscal de Lieja, Philippe Dulieu, el ataque ha comenzado a las 10.30 de la mañana cuando un individuo ha atacado con un arma blanca y por la espalda a dos agentes de policía, a la altura del café des Augustines, en el centro de esta ciudad de Valonia. Tras asestarles varias cuchilladas les ha robado sus respectivas armas de servicio y les ha asesinado. Seguidamente ha disparado contra un joven de 22 años que ocupada el asiento del pasajero en un vehículo.

Tras matar supuestamente a estas tres personas, el joven ha proseguido su camino y se ha refugiado en el instituto Léonie de Waha donde ha tomado como rehén a una señora. La policía local ha reaccionado con rapidez. Los estudiantes, que no han estado en contacto con el atacante en ningún momento, han sido evacuados a través de la parte posterior del edificio por seguridad. Ninguno ha resultado herido, según han resaltado las autoridades.

También se ha desalojado el bulevard d’Avroy, en pleno centro de la ciudad, entorno al cual se ha establecido un perímetro de seguridad. Durante la intervención policial, la célula de policía local (PAB) ha abatido al agresor aunque otros dos agentes han resultado heridos en la pierna. La Fiscalía federal ha asumido el caso que será investigado como acto terrorista.

Según la radio RTBF, el autor del ataque se llama Benjamin Hermans, un joven de 36 años originario de la localidad de Rochefort, que habría salido este mismo lunes, gracias a un permiso penitenciario, de la prisión de Lantin, donde estaría encarcelado por delincuencia común. Según esta misma cadena se trata de un joven psicológicamente "inestable" y "marginalizado" y la policía no tendría constancia de su radicalización en prisión aunque varias de las personas que estaban en la zona han declarado haberle oído gritar Allahu Akbar.

Las imágenes en las redes sociales han mostrado a personas corriendo por seguridad en el bulevad central de Avroy, en Lieja, con los disparos y las sirenas sonando de fondo. Un vídeo mostró a dos policías con chaleco antibalas tratando de neutralizar al autor del atentado.

El primer ministro belga, Charles Michel, que sigue muy de cerca lo ocurrido a través del centro de crisis ha calificado de grave el incidente y ha mostrado su solidaridad con la familia de las víctimas. “Todo nuestro apoyo a las familias de las víctimas”, ha trasladado poco antes de partir hacia Lieja. También el ministro de interior se ha solidarizado. “Nuestros pensamientos están con las víctimas de este acto atroz de Lieja”, ha manifestado Jan Jambon. Al lugar de los hechos se han desplazado tanto el primer ministro como el rey Felipe. Pese a este nuevo ataque la OCAM, que evalúe el riesgo de atentado terrorista en el país, ha decidido mantener el nivel de alerta en Bélgica en el 2 en una escala de 4.

Lieja, una ciudad industrial cercana a la frontera alemana en la región de Valonia de habla francesa, también fue escenario de un tiroteo en el 2011, cuando un hombre armado mató a cuatro personas e hirió a más de 100 antes de dispararse.