En el departamento se han detectado brotes de esta enfermedad, por lo que los centros médicos han sido alertados para actuar. El aseo personal y las buenas defensas ayudan a reducir el riesgo de contagio

El Deber logo
5 de enero de 2018, 9:00 AM
5 de enero de 2018, 9:00 AM

Si advierte un lagrimeo abundante, irritación, la sensación de tener un cuerpo extraño en los ojos o los nota inyectados en sangre, puede estar siendo víctima de conjuntivitis, una inflamación de la cubierta delgada transparente de la parte blanca del ojo y del interior de los párpados, por lo que debe acudir de inmediato a un centro médico a recibir atención especializada antes que recurrir a remedios caseros.

La conjuntivitis es causada por virus o bacterias y es muy contagiosa; se propaga fácilmente de persona a persona, por lo que puede extenderse rápidamente si no se controla. En Santa Cruz está afectando a muchas personas, especialmente en la capital oriental y en regiones del este del departamento, por lo que el Servicio Departamental de Salud (Sedes), mediante una circular emitida a la red de salud el 21 de diciembre de 2017, declaró alerta con la finalidad de prevenir y controlar esta enfermedad.

Brote epidemiológico
A comienzos de diciembre del año pasado a Bolivia llegó la información de que en 33 países de Latinoamérica se presentaron brotes de conjuntivitis, lo que provocó la declaratoria de alerta para la respectiva prevención y control, manifestó Roberto Torrez, gerente de la Unidad de Epidemiología del Sedes, entendiendo que la permanente movilidad de las personas puede transportar fácilmente el virus de un lado a otro.

Asimismo, Torrez explicó que el primer foco infeccioso detectado en el departamento se registró en mayo de 2017 en la localidad de Yaguarú (provincia Guarayos), donde ese mes hubo una frecuencia de 11 casos. En los meses posteriores se verificaron más víctimas del mal virulento (en noviembre hubo 57) hasta totalizar 115 casos.

Para Torrez, el brote de Guarayos puede ser una extensión de los casos de conjuntivitis reportados en Trinidad (Beni),  donde, en la primera semana de diciembre, el epidemiólogo del Sedes, Antonio Castro, informó de que en ese departamento se reportaron 1.100, de los cuales un 80% correspondieron al municipio de Trinidad.

En San Ignacio de Velasco se reportó un brote de la enfermedad. Carlos Castillo, gerente de la Red de Salud Chiquitania, no dio cifras, pero dijo que “el brote comenzó con algunos casos; no se trata de una epidemia, pero afectó a niños, jóvenes y personas mayores de la zona urbana y de comunidades rurales”.

En Puerto Suárez, Dina Huanca, directora interina del hospital municipal San Juan de Dios, habló de la aparición de varios casos de inflamación de la capa blanca de la conjuntiva.

Modo de transmisión

Los principales tipos de conjuntivitis, según su causa, son: viral, bacteriana y alérgica. La viral produce lagrimeo y picazón en los ojos; sensibilidad a la luz. Pueden estar afectados uno o ambos ojos. Es altamente contagiosa; puede propagarse por la tos o estornudos, pero es la más benigna.

En la conjuntivitis bacteriana se observa una secreción amarillenta o verde-amarillenta y pegajosa en la esquina del ojo. En algunos casos, esta secreción puede ser tan abundante que provoca que se peguen los párpados al despertarse. Pueden verse afectados uno o ambos ojos. Es contagiosa y puede dar lugar a serios problemas del ojo como úlcera corneal y potencial pérdida de la visión.

La conjuntivitis alérgica provoca lagrimeo, ardor, picazón en los ojos; puede estar acompañada de mucosidad y congestión nasal, así como sensibilidad a la luz. Ambos ojos se ven afectados. 

Estas afecciones se pueden transmitir por contacto directo con las secreciones oculares de una persona infestada y de manera indirecta por medio de superficies, instrumentos o soluciones contaminadas (tocar algo que el infectado tocó). Es frecuente la transmisión por el personal de salud en consultorios y es común la diseminación dentro del núcleo familiar, donde los niños suelen ser quienes introducen la infección.

Medidas de control

Según Torrez, el aseo personal es clave para reducir el riesgo de contraer el mal, cuyo periodo de transmisión es desde el final del tiempo de incubación (de 5 a 12 días) hasta 14 días después del comienzo del cuadro clínico.

El paciente debe ser aislado por lo menos una semana si la conjuntivitis es viral, para evitar el contagio a otras personas. La autoridad epidemiológica recomendó a los pacientes no usar toallas comunes ni automedicarse con colirios con corticoides.
Torrez dijo que es necesario confirmar el diagnóstico clínico mediante examen o cultivo para diferenciar la conjuntivitis bacteriana de la viral, de la alérgica o de la infección por adenovirus o enterovirus, que puede causar cuadros hemorrágicos.

Luis Carlos Bernachi, médico pediatra del Hospital de Niños Mario Ortiz, informó de que en dicho centro asistencial no se registró hasta el momento ningún paciente por consulta. Ratificó que la higiene personal es importante para esquivar la infección, así como mantener elevadas las defensas del organismo.

La conjuntivitis afecta a chicos y grandes. La incidencia disminuye con la edad. Por lo visto hasta el momento, el pediatra Fabián Barja cree que la viral es la que, al parecer, está atacando a la población en Santa Cruz.

PARA COMBATIR LA INFECCIÓN

Evitar contacto con el enfermo
El aseo personal conlleva no compartir toallas o artículos de tocador con otras personas. Evitar el uso compartido de goteros o medicamentos oftálmicos.

En los consultorios
La asepsia debe incluir el lavado meticuloso de las manos antes de examinar a cada paciente y la esterilización de los instrumentos que entran en contacto con las conjuntivas o los párpados; deben usarse guantes para explorar los ojos.

En caso de brote epidémico
El personal médico debe atender a los individuos en instalaciones separadas en los centros asistenciales para evitar contagios.

Periodo de incubación
Por lo general, la conjuntivitis viral incuba en un lapso de 24 a 72 horas y su periodo de transmisibilidad se da mientras dure la infección activa (siete días generalmente).

Aislamiento
Los niños infectados no deben asistir a clases (no ha empezado el periodo lectivo en Bolivia) y los adultos informar en su fuente laboral si padecen la enfermedad.

Tratamiento específico
De manera regular, es eficaz la aplicación local en ambos ojos de ungüentos o gotas oftálmicas, debidamente recetados por médicos especialistas, de gentamicina, cloranfenicol, ciprofloxacina, etc.