El deseo de aprender se incentiva con un horario para estudiar, un ambiente adecuado y cediendo tiempo para el ocio. Dos pedagogas explican las claves del éxito escolar 

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6 de febrero de 2018, 6:00 AM
6 de febrero de 2018, 6:00 AM

La práctica hace al maestro y a los buenos estudiantes. Si los padres buscan lograr cambios concretos y sostenibles en la formación de sus hijos, deben recordar que la planificación es la clave. Se requiere además de la orientación de profesionales para evitar que el exceso de tareas o de clases particulares provoque el efecto contrario, es decir, el rechazo o la apatía por el estudio. 


Por eso, a continuación, se enumeran cinco claves para fomentar hábitos de estudio en los colegiales, explicados por la sicopedagoga y consultora Silvia Roca y la sicopedagoga del Cristo Rey, María Eugenia Vaca Díez.  

 

1. Tener un horario. Lo recomendable es establecer una rutina. Para eso, si es necesario, se puede elaborar e imprimir un horario y pegarlo en el cuarto del niño o cerca. En este horario se debe contemplar las horas de clases, las horas de descanso y las horas para hacer la tarea.  
Al respecto, la sicopedagoga Roca aconseja para los niños un máximo de dos horas diarias para la tarea, intercaladas con 15 minutos de descanso, y para los adolescentes tres horas diarias de tareas, con un intervalo de media hora de descanso.

 

2. Tiempo de ocio. Luego de que los estudiantes hayan cumplido con sus actividades, también se aconseja darles horas de descanso, esto no quiere decir necesariamente que se queden estáticos mirando televisión, sino que practiquen juegos que estimulen su concentración.
La sicopedagoga Vaca Díez aconseja para los niños juegos didácticos como rompecabezas o bloques. En el caso de los adolescentes señala que deben realizar acuerdos previos. “Se les puede dar una hora para el gimnasio, redes sociales, etc.”, dijo. 

 

3. Cursos extracurriculares. No es recomendable sobrecargar al estudiante con clases extracurriculares al inicio del año, debido a que en esta primera etapa la prioridad es que se concentre en adecuarse al ritmo académico. De igual forma, no es necesario que tome clases de nivelación debido a que se encuentra en un proceso de adecuación.


“Las clases extracurriculares deben plantearse de acuerdo a las capacidades y habilidades de los estudiantes. Al inicio de clases lo que queremos es que se concentren. Tal vez sea bueno para los niños hiperactivos a manera de terapia”, explicó Roca. 

 

4. Un ambiente adecuado. Es necesario dotarle al niño de un ambiente de trabajo. No hace falta mucho espacio, basta con que se le disponga de una mesa en un lugar con luz apropiada, sin ruido ni otros ‘distractores’ (calle, hermanos, etc.).


“Al apoyar a los niños y generarles hábitos de estudio adquieren responsabilidad, y los padres ya no pasan tanto tiempo repitiéndoles lo que tienen que hacer”, añadió Vaca Díez.


 
5. Práctica y paciencia. Los hábitos surgen por reiteración. Puede que al inicio cueste, pero con el acompañamiento de los padres lo lograrán. Hay que evitar reñirles, alzarles la voz y comprender que es normal que se equivoquen durante el proceso de aprendizaje.