Raysa y Sirena Ortiz. Las actrices que dan vida a Estela y Sara Bravo en 'De vuelta al barrio' hablan de una vida que vale por dos

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25 de noviembre de 2018, 8:00 AM
25 de noviembre de 2018, 8:00 AM

Apenas tenían siete años cuando sus bellos rostros adornados por un par de hermosos ojos verde turquesa, comenzaron a confundir a los televidentes, que pensaban que estaban viendo doble. Raysa y Sirena Ortiz Vilela son gemelas idénticas. Lo único que las diferencia son tres centímetros de estatura y unos dos kilos, además del tono de voz y la forma de hablar.

Desde muy pequeñas, su abuela materna, Luisa García, se encargó de promocionarlas. Ella las llevaba a cuanto casting de niños aparecía. Dejaba sus datos y sus fotos para que las tomen en cuenta. Así fueron creciendo entre comerciales de televisión, desfiles de moda y sesiones fotográficas, siempre apoyadas por sus padres Guadalupe Vilela y Marcos Ortiz.

Pero no fue sino hasta 2017 que sus vidas cambiaron radicalmente. Cuando Raysa y Sirena se convirtieron en las gemelas Estela y Sara, respectivamente, de la telenovela peruana 'De vuelta al barrio' (una historia basada en los años 70 y que tiene a los televidentes prendidos al televisor no solo en Perú, sino también en Bolivia y Ecuador) nunca más pasaron desapercibidas.

'De vuelta al barrio' fue el debut actoral de Raysa. Sirena ya había hecho algunos papeles secundarios en las series Al fondo hay sitio y Avenida Perú. Ambas ya habían participado en teatro, publicidades, cortometrajes, pero nunca estuvieron en una producción tan grande como esta telenovela. Para las gemelas ese fue el gran salto a la fama, de la mano de América TV.

Raysa estaba estudiando nutrición; Sirena, Diseño de modas, cuando las invitaron a realizar el casting para participar la serie. Fueron por separado, pero, cuando Gigio Aranda, creador de la novela, se enteró que eran gemelas, creó los personajes de Estela y Sara.

“Cuando nos llamaron para decir que fuimos seleccionadas, nos quedamos sorprendidas. Gritamos de la emoción y de felicidad. Se estaba cumpliendo nuestro sueño de trabajar en lo que nos apasiona y en un proyecto tan grande”, recuerda Sirena.

Las dos tienen sus metas bien definidas. La serie es tan solo el primer escalón de los muchos que tienen pensado remontar. Hollywood está en la cabeza de ambas y hacia ese objetivo apuntan las dos actrices.

Ficción y realidad

Sobre su personaje, Sirena dice que Sara es dulce, soñadora, introvertida, enamoradiza, apasionada por las historias de amor, pero aclara que en la vida real, no es tan así. Algo que tienen en común es la timidez, que la acompañó desde pequeña y que gracias a los cursos de modelaje, de teatro y de actuación, ha logrado superar. “Siempre fui muy callada y no muy entradora, todo lo contrario de Raysa, que se abre más con las personas. A mi me cuesta entrar en confianza”, afirma. En cambio, Estela, el personaje que hace Raysa, una chica rebelde, práctica, directa, resuelta y hasta un poco amargada, tiene mucho de ella. “Nada de aburrida ni amargada, pero sí soy muy extrovertida”, dice.

En sus gustos hay similitudes y diferencias. Mientras Raysa disfruta más de la playa y del calor y odia los mariscos, Sirena ama el frío y le encanta la comida de mar. En común tienen que a las dos les encanta el ceviche con harto picante y no les atrae las pastas ni los chocolates.

Si bien en la teleserie las hermanas Ortiz interpretan a dos jovencitas inocentes del siglo pasado, en la vida real y en sus cuentas de Facebook y de Instagram, se muestran más distendidas. Siempre suben fotos, no solo de trabajo, sino también de su vida cotidiana.

Les gusta interactuar con sus fans. En este sentido, hace poco crearon su canal de Youtube al que denominaronVida de gemelas. Ahí, sus seguidores pueden conocer el día a día de las actrices, enterarse de anécdotas y aprender tendencias en moda, belleza, viajes y todo lo que envuelve y atrae a estas jovencitas, que el pasado 10 de agosto cumplieron 23 años.

Amigas y confidentes

No solo son hermanas. Son amigas y cómplices. Aseguran que el vínculo de las dos, no es el mismo que tienen con sus otros cuatro hermanos: Fiorella, Guadalupe, Marcos y Charly, con quienes también se llevan muy bien, pero no existe la misma conexión.

“Nos llevamos superbien. Somos seis hermanos. Crecimos en una familia unida y feliz, aunque con Raysa, hay algo más. Sentimos lo que siente la otra. Incluso si mi ‘geme’. está enferma, yo lo siento. Siempre compartimos el mismo cuarto, estudiamos en el mismo salón, somos confidentes, nos contamos todo, nos hacemos bromas y jugamos... Claro que también discutimos y peleamos, pero solo de boca. Nunca llegamos a las manos. Nacimos casi al mismo tiempo y prácticamente no nos separamos para nada, aunque hace poco mi gemela ya se independizó, pero igual paramos juntas”, cuenta Sirena.

Raysa agrega que, físicamente, son tan parecidas, tanto como dos gotas de agua, pero sus personalidades son distintas. Eso sí, se complementan, una a la otra, y se tienen mucho respeto. “La amistad y el amor que nos tenemos está por encima de cualquier diferencia. “Lo que adoro de Sirena es que siempre está pendiente, me ayuda y me protege en todo”, remarca.

Aman bailar y cantar

En las redes siempre suben videos haciendo coreografías a dúo. Es una de sus pasiones, al igual que cantar. Ahora están felices ya que cumplieron otro de sus sueños que es la grabación de un cover del tema Loca, de la mexicana Maite Perroni y Cali & El Dandee. Interpretaron la canción al lado del dúo peruano Álvaro & Río. No descartan grabar un tema propio y destacar en la música.

El consejo que dan a los jóvenes es que crean en sus sueños, pero para lograrlo deben prepararse, estudiar y ser ordenados en su vida. Divertirse, pero con límites.

2. Apoyando al combinado peruano. Sirena y Raysa disfrutaron del Mundial de Rusia y apoyaron a su selección, que clasificó después de 36 años.
3. Dos gotas de agua. Las gemelas aseguran que el cambio en sus vidas ha sido muy grande, pero siguen siendo ellas, con las mismas costumbres y yendo a los mismos lugares.

¿Juego de gemelas?

¿Alguna vez una ha sustituido a la otra? Le consultamos. En la novela muchas veces, pero en la vida real dicen que nunca se hicieron pasar la una por la otra para despistar a sus enamorados. Aunque en una ocasión Sirena dio un examen de historia, porque le encanta, en lugar de Raysa, mientras que ésta la reemplazó en un ensayo de teatro.

Sus papás y hermanos saben diferenciarlas bien. Lo que siempre suele suceder es que las etiquetan en las fotos de Face siempre al revés y en el trabajo hasta ahora las confunden. “Estamos acostumbradas, lo bueno es que nuestros enamorados siempre nos reconocen”, asegura Sirena.

Pero Raysa recuerda que una vez un enamorado de Sirena la confundió y la abrazó de atrás. Ella se volteó y le cuestionó, ¿por qué me abrazas? Él sonrojado y entre risas se disculpó diciendo: ¡Es que de atrás se parecen mucho más!