Realiza un trabajo arduo a días del estreno del musical más grande montado en Bolivia. Invitado por la Orquesta Filarmónica, pule el trabajo en actuación musical

El Deber logo
20 de noviembre de 2018, 4:00 AM
20 de noviembre de 2018, 4:00 AM

Ray Fellman detrás de un piano, es como la extensión de sí mismo. El coach contó a EL DEBER su trabajo como entrenador vocal de los artistas que estarán en el musical Los Miserables. Con toda honestidad dijo que se encontró con grandes talentos en Bolivia, pero que hasta el estreno de la obra, el 22 de noviembre, estará empeñado en que cada pieza sea pulida y que cada parte de este desafío pueda entenderse a cabalidad.

 Los Miserables es uno de los musicales más grandes que se monta en Bolivia, ¿con qué talentos se encontró acá?

El talento es magnífico. Sé que esta es una forma nueva de arte, que tal vez la filarmónica no esté acostumbrada a hacerlo, siendo un musical diferente a la música clásica y a la ópera, pero los cantantes están abrazando esta nueva idea, aceptando este nuevo reto de una manera muy hermosa y creo que va a ser fantástico.

¿Qué implica armar un espectáculo de esta magnitud?

Es bastante divertido de alguna manera el poder cavar y encontrar estos desafíos. Y del mismo modo, colaborar con los distintos tipos de fuerzas que se necesitan para llegar a hacer un musical.

Primero tenemos los solos, el ensamble y los coros. También tenemos la orquesta y la vestimenta. Luego viene la puesta en escena y muchísimas cosas con las que también tenemos que trabajar, como la publicidad. Entonces para mí, ser parte, ser una pieza de esto que estamos trabajando, es muy emocionante.

 ¿Cómo están involucrados esos elementos, como la puesta en escena, la orquesta, la actuación o la música, siendo cosas tan diferentes entre sí?

Por ahora están trabajando muy bien juntos. Hay un liderazgo bastante bueno que ayuda a que cuando nos juntamos hacemos un buen trabajo.

Tenemos a Isaac Terceros, Jacky McCaig y a la líder de la escena, Karina (Troiano), quienes están trabajando duro y logrando cosas maravillosas.

 ¿Hay todavía detalles que pulir, cosas por mejorar?

Sí. Mayormente en el arte musical, en el que yo soy profesor, lo más importante para nosotros es hacer un desafío a la historia. Mi objetivo número uno es asegurarme de que cada parte, cada pieza musical de todo esto pueda trabajarse junto y pueda entenderse.

El contar la historia es mi prioridad, porque podemos cantar, pero no contar ninguna historia. Y mucho de lo que hice es eso, asegurarme de que la persona sienta lo que está diciendo y se lo transmita a los demás.

Esta obra maestra de Víctor Hugo nos brinda un montón de oportunidades para hacerlo.

 ¿Ha visto posibilidades de volver a Santa Cruz a montar espectáculos parecidos o tal vez más grandes?

Sí, porque estoy teniendo un tiempo maravilloso aquí. Así que, estaría más que feliz de regresar.

 Y hablando de Los Miserables, ¿se pudo armar tal como se lo quiere mostrar al público cruceño, tomando en cuenta los talentos locales?

Absolutamente sí.

 A lo largo de su carrera, ¿había realizado musicales o había sido coach de cantantes en habla castellana?

Sí, trabajé en Quito, Ecuador, y también en Guayaquil. Allá también hicimos Los Miserables, El barbero y una historia del viejo oeste. La directora Chapetillo, del teatro Sucre, me dio el tique de entrada a Sudamérica para que yo pueda trabajar con músicos de habla hispana.

¿Qué musical en castellano le gustaría realizar, hay alguno que le llame la atención?

Esta pregunta me lleva a decir que Los Miserables sería una obra magnífica si se la hace en español. Si se refiere a hacer algo traducido sería ese, pero si se refiere a algo netamente con todos los elementos de la historia de Sudamérica, sería armar una nueva historia, una nueva creación.

Tendría que aprender más de historia hispánica. Sería fantástico contar la historia de la independencia, con Simón Bolívar y Antonio José de Sucre.

Si El jorobado de Notre Dame es una historia conocida aquí, esa sería una buena adaptación para este público. El verano pasado, en Estados Unidos trabajé en el desarrollo de esta obra.

¿Cuál fue su trabajo en los últimos meses antes de venir a Santa Cruz?

Recientemente hice una producción para la Isla del Tesoro, escrita por Robert Louis Stevenson. Fue un musical nuevo basado en esta novela bien conocida.

Lo emocionante para mí fue que se trataba de una pieza completamente nueva. Todavía no ha llegado a Nueva York, así que está en pleno desarrollo. Queremos que llegue a lugares famosos como Broadway, estamos cruzando los dedos para que eso suceda.

Tags