Alfredo Rada dijo que hay gente que añora los tiempos neoliberales en que los gobiernos eran dirigidos por patrones y terratenientes. Aseguró que ahora temas salariales se acuerdan con trabajadores y el pueblo

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30 de mayo de 2018, 13:46 PM
30 de mayo de 2018, 13:46 PM

El ministro de la Presidencia, Alfredo Rada, recordó que el Gobierno de Evo Morales es de los trabajadores y no de la clase empresarial, por lo que desestimó las exigencias que salieron del Congreso Empresarial que se realizó el martes en la ciudad de Santa Cruz.

“Ratificamos lo que hemos dicho en varias ocasiones. El Gobierno del presidente Evo Morales, es un Gobierno de los trabajadores. Por lo tanto, entre trabajadores y el pueblo es que se acuerdan aquellos temas en este caso, de políticas salariales”, dijo la mañana de este miércoles en Palacio de Gobierno.

Luego de seis horas de reunión, unos 300 empresarios y emprendedores del país elaboraron diez conclusiones que buscan ser la brújula que los guíe en un contexto al que consideran poco amigable para el desarrollo empresarial y la generación de nuevos puestos de trabajo.

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Ronald Nostas, presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), hizo foco en que ya no es sostenible la fórmula de la bilateralidad (Gobierno y la COB) y descalificó las políticas salariales asegurando que no responden a la realidad económica y que solo responden a un sector privilegiado de la COB, por lo que informó que una delegación de la organización se encuentra presentando una denuncia ante la Organización Internacional del Trabajo  (OIT) aprovechando la conferencia que se desarrolla en la ciudad de Ginebra (Suiza), a fin de activar  los mecanismos legales para que, en su criterio, los gobernantes cumplan con los compromisos adquiridos en el marco del respeto al mundo del trabajo.

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En ese sentido, el ministro Rada dijo que todavía hay gente que añora los tiempos neoliberales en que los Gobiernos eran dirigidos por los banqueros, patrones y terratenientes “y no les gusta que haya un gobierno de los trabajadores, del pueblo”.

Aclaró sin embargo, que esto no significa que no se escuche a los empresarios ni que se respete a la iniciativa privada.