Al 40% de avance de cosecha del ciclo de invierno (trigo, girasol, maíz, sorgo y chía), se segó 516.175 de las 1.604.200 toneladas de granos proyectadas, sin contar soya

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21 de agosto de 2018, 6:00 AM
21 de agosto de 2018, 6:00 AM

Lejos de curar las profundas heridas de una prolongada sequía que en ciertas zonas productivas del este de Santa Cruz supera los tres meses, la leve lluvia caída ayer apenas salpicó los sembradíos de trigo, girasol, maíz, sorgo y chía en Pailón, Cuatro Cañadas, San Julián y San José de Chiquitos. Llegó fuera de tiempo.

“Aunque llueva un montón, el perjuicio es irreversible en el maizal. La seca y los gusanos cogolleros se tiraron las 47 hectáreas del ‘grano amarillo’ que sembré y me dejaron una factura de unos $us 7.000 que gasté en semilla y servicios agrícolas”, dijo Félix Salguero, en la comunidad de 5 de Junio, del municipio de Cuatro Cañadas.

El agricultor aseguró que su mayor preocupación es que comprometió el pago de los insumos agrícolas con la cosecha y parte de sus bienes. “Lo peor es que los proveedores han comenzado a presionar para recuperar su capital y amenazan con demandas, remates, anotaciones preventivas y secuestro de bienes”, puntualizó Salguero.

Al respecto, el ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), Jacinto Herrera, indicó que solicitarán a las organizaciones productivas, cuyos afiliados estén perjudicados por la sequía en la zona este, elevar un listado para hacer una representación sectorial y así justificar el deterioro de la economía de los pequeños productores.

Desde la perspectiva del dirigente, lo más sensato es ver la forma de flexibilizar las normas dando posibilidad al productor de reprogramar sus créditos o establecer nuevos planes de pago.

Desde el ámbito público, Herrera cree que el Gobierno y las entidades territoriales autónomas departamentales y municipales deben asistir con semillas y, en lo posible, maquinaria a los agricultores para que vuelvan a sembrar en el ciclo de verano.

En lo productivo

Según la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), al 40% de avance de cosecha de los cultivos del ciclo de invierno (trigo, girasol, maíz, sorgo y chía), los rendimientos de los granos dejan un sabor amargo y corroboran la disminución de los rendimientos por sequía.

A decir del gerente técnico de Anapo, Richard Trujillo, hasta el momento se cosecharon 516.175 de las 1.604.200 toneladas de granos proyectadas, sin contar soya, que corresponden a la primera siembra (marzo y abril) cuando se registraron lluvias. “Lo que aún queda en campo es lo que toca a la segunda siembra, mayo y junio, justo la época de mayor déficit hídrico, hasta hoy, en zonas de Pailón, Cuatro Cañadas y San Julián. La disminución de la producción de granos se sentirá de aquí en adelante”, manifestó.

Con datos de Anapo, el área sembrada en invierno de este año, sin contar soya, fue de 694.000 hectáreas, de las que tenía proyectado recoger 1.604.200 toneladas de granos en condiciones climatológicas normales. Ahora, por sequía, el sector estima cosechar 600.000 toneladas menos. En valor, estiman pérdidas por más de $us 110 millones.

Balance estatal

De acuerdo con la Unidad de Contingencia Rural del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, el 16 y 17 de este mes se visitaron tres municipios (Pailón, Cuatro Cañadas y San Julián, de los seis comprometidos por déficit hídrico) y se verificó que la superficie afectada varía entre un 5 y 30% y que cerca del 10% del área sembrada presenta daños sin probabilidad de recuperación.

El trigo registra un 23% de disminución del rendimiento esperado; el maíz, un 31%; el sorgo, un 29%; y el girasol, un 33%. Creen que estas afectaciones son resultado de las bajas precipitaciones registradas entre junio y julio.

Aseguran que los municipios antes citados tienen vigente su declaratoria de emergencia por eventos climatológicos (sequía e inundaciones), mecanismo que puede facilitar la gestión para ampliar o reprogramar deudas.

 

Apuntes

Reporte sectorial

Una evaluación realizada por técnicos de la Cámara de los Pequeños Productores (Cappo) advierte que en Pailón, Cuatro Cañadas y San Julián un 70% de las áreas cultivadas de trigo, sorgo y maíz están afectadas.

Proyección cumplida

Según la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), las lluvias caídas en campos de producción del Norte Integrado permitieron alcanzar las 300.000 hectáreas de soya proyectadas en invierno.