Mario Guillén asegura que el crecimiento económico del segundo semestre de 2017 llegó al 4,9%. Los microempresarios aseveran que no han crecido ni el 1%. La CEPB ve que el pago será por interés político 

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27 de junio de 2018, 4:00 AM
27 de junio de 2018, 4:00 AM

La situación económica de Bolivia está mejor que la del año pasado, por lo que se abren las expectativas, según el Gobierno, para que los trabajadores puedan recibir el pago de un segundo aguinaldo a fin de año, en recompensa por su trabajo. Pero el sector empresarial y los microempresarios no tienen la misma lectura al respecto.

“Los indicadores que tenemos  en el sector hidrocarburos, es que se ha mejorado. En inversión, estamos mejor que el año pasado, al igual que en recaudaciones tributarias. Todos estos indicadores nos están mostrando que el crecimiento de la economía va a estar mejor que el primer semestre (de 2018). Si a ello le sumamos que en el segundo semestre del año pasado hemos tenido un crecimiento aproximado del 4,9%, entonces estamos en buen camino para el pago del segundo aguinaldo”, manifestó ayer el ministro de Economía, Mario Guillén.

No obstante, habrá que esperar a que el Instituto Nacional de Estadística (INE) revele el crecimiento del primer semestre de 2018, que se conocerá en septiembre u octubre, para que se cumpla el Decreto Supremo 1802 que instituye el pago del segundo aguinaldo Esfuerzo por Bolivia, condicionado a un crecimiento económico del 4,5%.

El ministro Guillén habló del tema que preocupa al sector empleador, durante la presentación de la Memoria de la Economía Boliviana 2017, donde la autoridad destacó la estabilidad de la economía en los últimos 12 años del Gobierno de Evo Morales, pese al contexto internacional adverso que afectó a las economías de los países vecinos.

En ese sentido, dijo que el crecimiento económico sostenido   se debe a la aplicación del modelo económico, social comunitario y productivo, vigente desde 2006.

Algunos datos

El documento menciona, entre otros datos, que la gestión 2017 cerró con un crecimiento, entre enero y diciembre, del 4,2% del Producto Interno Bruto (PIB), pero esta cifra no alcanzó para la cancelación del doble beneficio de fin de año. 

Pero a escala sudamericana, por cuarto año consecutivo, Bolivia siguió liderando en crecimiento económico. Este aumento solo fue igualado por Paraguay. 

Llamó la atención que los sectores de agropecuaria, industrias de alimentos, bebidas y tabaco; transporte y comunicaciones; comercio, construcción, entre otros, identificados como sectores generadores de empleo, sostuvieran un crecimiento de entre el 5% y el 7,6%.
Mientras que los sectores relacionados con la demanda externa (minería, resto de industrias e hidrocarburos) fueron los más desfavorables.

Ya para este año, el Gobierno prevé que en los próximos meses, las instancias subnacionales (gobernaciones y alcaldías) reciban un 15% más por el tema de la venta de hidrocarburos al exterior.

Sectores paralizados

Entre tanto, el sector micro y pequeño empresarial se vio nuevamente confundido por los datos del Gobierno, ya que afirman no haber crecido ni el 1% en los últimos meses.

“Los microempresarios estamos en emergencia. Estamos por realizar marchas y protestas.  Nosotros no estamos en posibilidades de pagar ningún otro aguinaldo. Hemos dicho antes que estamos en sobrevivencia, sobre todo el sector textil. La economía puede ser que esté bien, según el criterio del ministro (Guillén), pero no tiene conocimiento del sector pequeño y no lo toman en cuenta”, aseguró Germán Canaviri, representante de la Confederación Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (Conamype).

Lamentó que pese a que generan más empleos, no tienen apoyo de tecnologías ni de exportación ni para su producción. “Además, padecemos por el tema del contrabando. No hay políticas para el sector. No hay crecimiento sino sostenimiento en decadencia”, afirmó.

No conocen informes

El presidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Horacio Villegas, criticó que el Gobierno nacional se siga anticipando a los hechos, ya que por lo general, el cierre del análisis del crecimiento todavía no se sabe.

“El ministro parece que tiene datos que nosotros no conocemos. De acuerdo a las previsiones de crecimiento de varias instituciones internacionales que dieron el año pasado, algunos han corregido a la baja hasta un 3,9%, pero no a la alta. Probablemente no estamos siguiendo los mismos datos. No sabemos de dónde sacan”, dijo Villegas.

Desde ya, dijo que les llamó la atención el anuncio prematuro que hizo el presidente Evo Morales el primero de mayo y “lo que están haciendo es confirmar su declaración”. 

A la espera de un debate

La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) continúa en estado de emergencia y en su último congreso realizado en mayo pasado demandó un espacio de debate y análisis sobre el pago del segundo aguinaldo, “puesto que es inviable su pago en el contexto actual”. 

El presidente de la entidad, Ronald Nostas, manifestó a EL DEBER que “ojalá Bolivia pudiera crecer al 7%, 8% o 10% y que este crecimiento fuera equitativo para que se rompan las desigualdades tan pronunciadas”.

“Y ojalá que se deje de pensar solamente en el 30% de los que se benefician con los aumentos y los aguinaldos y tomen en cuenta al 70% que vive sin seguridad, sin estabilidad y sin beneficios.  Una de las mayores preocupaciones en este tema tiene que ver precisamente con la constatación de que el segundo aguinaldo en este 2018 no está pensado como un beneficio que dependa realmente del crecimiento real, sino más bien como un compromiso político”, finalizó.

La cifra

37,7 mil millones de dólares es el PIB que Bolivia alcanzó al finalizar la gestión 2017, según la Memoria 2017.