Entrevista. El líder de ISA Bolivia expuso que su empresa está lista para asumir proyectos de envergadura que estén relacionados con la transmisión de energía. Ve a Bolivia en una posición privilegiada en la región

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4 de septiembre de 2018, 19:58 PM
4 de septiembre de 2018, 19:58 PM

Con un café en la mano, el gerente general de ISA Bolivia, Nelson Mesa Palacio (44), abrió las puertas de la subestación Urubó para hablar de las operaciones de la empresa y sobre el potencial que existe para generar proyectos de energía que conecten a la región, un sueño que ve posible a futuro y donde la compañía, que cumplió 15 años de operación en Bolivia, tiene la capacidad y experiencia para llevar adelante.

—Después de concretar la internacionalización del Grupo ISA, ¿en qué etapa se encuentra y cuál es el escenario que enfrenta ISA Bolivia?

Han sido 15 años de aprendizaje, de confianza en el país y en las personas. En 2003, luego de ganar una licitación internacional, se conformó ISA Bolivia y empezamos a construir 588 kilómetros de línea de transporte de energía eléctrica y cinco subestaciones. Iniciamos operaciones en 2005 y los éxitos están asociados a nuestra forma de trabajo, con recursos propios y desarrollo humano, y a conformar la infraestructura y el proyecto. Ahora estamos enfocados en ganar eficiencia con sistemas de gestión de avanzada y participar en los procesos de expansión donde el Estado considere que podemos ayudar.

—Ustedes prestan servicios al sector público, ¿cuál es la escala de participación de ISA Bolivia?

Participamos en el sector de la transmisión de energía eléctrica. Tenemos casi el 18% de la red de transmisión en 230.000 voltios, una participación relevante. Somos una de las cuatro empresas que prestan este servicio en Bolivia. Actualmente, el Estado tiene una definición donde el crecimiento de la red se hace a través de empresas públicas; sin embargo, estamos en conversaciones para evaluar la posibilidad de tener una participación más activa.

—¿Hay proyectos en carpeta?

En el país hay muchos proyectos. La definición del país de convertirse en el nodo energético de Latinoamérica abre posibilidades de conexiones internas como internacionales y vemos que posibilidades hay muchas. Esperamos trabajar con el Estado de manera conjunta en el desarrollo de sus proyectos en el futuro.

—Además del Gobierno, ¿ISA Bolivia cuenta con otros socios comerciales en el país?

Tenemos contratos firmados directamente con el Estado; es nuestro socio principal. Estamos operando dos licencias de concesión. Respondemos por esos contratos a través de nuestra operación. El modelo con privados no está dentro de nuestro portafolio.

—El Gobierno planea exportar los excedentes de energía, ¿ustedes tendrían participación?

En este momento no. La definición del Estado es construir las infraestructuras con sus propias empresas. Aunque sí tenemos la capacidad y experiencia para integrarnos a trabajos como este. Son proyectos parecidos a algunos en los que ya participamos: interconexiones Colombia-Venezuela y Colombia-Ecuador.

—¿Planean expandir sus negocios en el país?

Digamos que no. Nuestro sector es la transmisión de energía, que es regulado por el Estado y este define las líneas para construir y alimentar a los usuarios.

—El Grupo ISA tiene competencias en otros sectores, ¿ve apertura para estos negocios?

Además de transporte de energía, el holding tiene servicios en telecomunicaciones. También participamos en negocios de concesiones viales, pero no en Bolivia, ya que es el Estado quien define a través de su agencia de infraestructura vial. Y el otro negocio está asociado a la operación de sistemas en tiempo real con una empresa del holding que se llama Sistemas Inteligentes en Red y que opera el tránsito de la ciudad de Medellín. Hubo aproximaciones para capturar experiencias e implementarla para la gestión del tránsito en Santa Cruz. Hay oportunidades, pero dependen de la definición estatal.

—¿Qué significa Bolivia para los negocios de la corporación?

Estamos en el nodo energético de Latinoamérica, posición esencial y un punto de enlace que queremos mantener. Tenemos un conocimiento del mercado boliviano que no tienen muchos agentes y termina siendo un puente entre conexiones que siempre hemos soñado, entre países de la región. Es una posición privilegiada.

—¿Qué porcentaje de los negocios representa ISA Bolivia y cuánto creció en estos años?

El Grupo ISA tiene unos 47.000 kilómetros de línea en alta tensión, nosotros 588 kilómetros. La proporción es pequeña, pero estamos en una posición privilegiada en el aspecto geográfico. En inversiones crecimos poco, nuestro enfoque fundamental fue la ganancia de eficiencia en el interior de la compañía. La inversión del proyecto que hay en Sucre es pequeña, cifra que no supera los $us 350.000.

—¿El tema del incremento de la tarifa eléctrica les beneficia de algún modo a implementar mejoras en su operación?

En absoluto. No tiene nada que ver con nosotros. El modelo de remuneración de la transmisión no depende de la tarifa. Si transportas mucha o poca energía no afecta, y si aumenta la tarifa tampoco. Estamos en un modelo donde recuperamos nuestra inversión con una utilidad.

Perfil

Tiene 44 años. Se graduó como ingeniero electricista en la Universidad Nacional de Colombia y tiene una maestría en Ciencias Económicas. Lleva más de 20 años de carrera en las filas del Grupo Empresarial ISA y ha pasado por distintas firmas de la corporación en países como Perú, Brasil y su natal Colombia. Desde enero de 2015 está a la cabeza de las operaciones de ISA Bolivia.