Asambleístas opositores aparecieron como oficialistas y autoridades del MAS sin militancia o en el bando contrario

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21 de noviembre de 2018, 6:46 AM
21 de noviembre de 2018, 6:46 AM

Los registros partidarios entregados al Tribunal Supremo Electoral (TSE) pintaron una realidad parecida al cuento del mundo al revés.

El diputado opositor Rafael Quispe apareció como militante del MAS, mientras que el no menos vehemente asambleísta oficialista Gustavo Torrico forma parte del FRI, de Carlos Mesa. El ministro de Trabajo, Héctor Hinojosa, apareció en las filas de Demócratas, como correligionario de Rubén Costas; la ministra de Culturas, Wilma Alanoca, es parte del Movimiento por la Soberanía, y Carmen, la hermana del vicepresidente Álvaro García Linera, del PDC, que ahora postula a la presidencia a Jaime Paz Zamora.

Este hecho generó conmoción y estupor en el ámbito político e incomodó a otras autoridades, como al defensor del pueblo, David Tezanos, que es militante del MAS, mientras que el senador opositor Óscar Ortiz denunció que el expresidente del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) Macario Lahor Cortez Chávez, relator de la sentencia que habilita la reelección indefinida de Evo Morales y que desconoció el 21-F, se encuentra registrado como militante del MAS.

Sorprendió que los ministros de Gobierno, Carlos Romero; de Justicia, Héctor Arce; de Obras Públicas, Milton Claros; de Comunicación, Gísela López; de Minería, César Navarro; de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, entre otros integrantes del gabinete del presidente Evo Morales, no son militantes del MAS.

La presidenta de Diputados, Gabriela Montaño, calificó de “absurda” cualquier iniciativa para suspender las primarias, pero alertó que “en su gran mayoría son registros antiguos, desde 1991 hasta mitad de 2018”, y que no son hechos aislados y merecen “acciones legales”, porque “están lloviendo las denuncias” de militantes del MAS registrados también en otros partidos, reportó la agencia EFE.

El expresidente Carlos Mesa dijo que para garantizar la transparencia de las elecciones primarias, el padrón debe ser confiable y la enorme cantidad de reclamos ciudadanos sobre inscripciones falsas puede poner en duda este requisito”, y puntualizó: “No es suficiente con poner a disposición de la gente la posibilidad de renunciar o anular una inscripción falsa, se debe investigar cada caso, identificando claramente a los responsables de la adulteración o falsificación de documentos o de registros, y procesarlos por los delitos que corresponda”.

Samuel Doria Medina aseguró en Twitter que “la solución era la inscripción en el padrón biométrico. El estilo ‘siglo pasado’, con libros y calígrafos, se presta a irregularidades y eleva la desconfianza en el Tribunal Electoral”.

El diputado Quispe dejó incluso abierta la posibilidad de mantenerse con la militancia del MAS para impugnar la candidatura de Evo Morales y Álvaro García Linera, restringida para quienes están inscritos en ese partido.