Se estiman en 20 las viviendas con daños severos. El Gobierno visitó la zona y comprometió ayuda. Aun hay personas desaparecidas

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8 de febrero de 2018, 6:00 AM
8 de febrero de 2018, 6:00 AM

A la 9:00 de la mañana el panorama en las calles alrededor de la avenida Ecológica en Tiquipaya era desolador. Muchas familias sumaban esfuerzos junto a voluntarios de los Bomberos, Policía, Fuerzas Armadas, el SAR y ciudadanos para poder limpiar el lodo de la mazamorra que marcó ese municipio con la tragedia. Autoridades confirmaron que son dos las personas fallecidas.

El viceministro Álvaro Terrazas señaló la mañana del jueves que el número de fallecidos podría aumentar y que al menos son seis las personas desaparecidas. 

 Familias enteras trabajando en las calles, desde el más joven hasta el más adulto con lo que tenían a la mano trataban de expulsar el lodo, las piedras, las ramas y todo lo que la mazamorra había arrastrado a sus viviendas. Maquinaria pesada trabajaba sin descanso limpiando el lodo y tratando de volver el río Taquiña a su cauce. 

Tiquipaya es un municipio de Cochabamba que está situado a unos 11 kilómetros de la capital regional, conocida como la ciudad de las flores. Su población vive de la agropecuaria, por lo que el 45% de sus tierras de cultivo están bajo riesgo. A solo 500 metros está el río Taquiña, que se desbordó la noche del martes.

Ayer, en medio del trabajo, el vicepresidente Álvaro García Linera junto al ministro de Defensa, Javier Zavaleta, el gobernador Iván Canelas y el general de Brigada Aérea, Jorge Terceros, iniciaban su recorrido por las zonas y viviendas afectadas. Varios vecinos se aproximaban a las autoridades para solicitar su apoyo, algunos con críticas y otros con desesperación. 

En medio del recorrido, la familia de Pacífico Jesús Aguilar, un ciudadano afectado, abría las puertas de su vivienda para mostrar la magnitud de los daños causados por la mazamorra. “Como vivimos a una cuadra del río, fui a advertir a las demás viviendas, pensamos que iba a llegar por el río, pero no fue así, nos sorprendió bajando por las calles de arriba. Nos fuimos a nuestras casas pensando que íbamos a estar a salvo e igual nomás el agua ingresó. Esta mazamorra no ha afectado solo a esta casa destruyendo paredes y electrodomésticos. Hay personas fallecidas y desaparecidas que aún necesitan ayuda”, dijo el hombre, afectado, mientras intentaba sacar el lodo de su cocina.

Aguilar recordaba con frustración los momentos de desesperación que vivió junto a su familia el martes por la noche. “Vivo con mis abuelos y mi esposa. El agua rompió primero las paredes y entró el lodo. Sentía impotencia por no poder ayudarlos porque ellos no podían salir. La corriente era muy fuerte, se llevó gente, se llevó animales, en sí, se ha llevado todo”,  contó y agregó que el agua había alcanzado una altitud de 60 centímetros dentro de su vivienda y había destrozado una imagen de la Virgen de Urkupiña que él tenía en su hogar.

El vicepresidente ingresó a la casa de Aguilar y fue testigo de los daños causados. Al escuchar el relato de Jesús y ver toda la vivienda inundada, la autoridad se comprometió a brindar la ayuda necesaria para que no vuelvan a ocurrir estos acontecimientos. 

Zona agrícola
El vicepresidente del Estado  comentó a los medios de comunicación que lo acontecido en Tiquipaya es una tragedia humana sin precedentes. “Casas llenas de lodo, desesperación de personas que han perdido familiares, familias que han perdido sus cositas, ahorro y maquinaria. Un sufrimiento terrible, Bolivia entera está entristecida”, comentó García Linera.

La  autoridad destacó la ayuda de municipios vecinos y la instalación de tres albergues por parte de la Gobernación de Cochabamba donde hay unas 80 personas.

De la misma forma, sostuvo que con la Guardia Civil hicieron posible la llegada de víveres, colchones, herramientas, ropa y frazadas. Por su parte, comprometió colaborar en el abastecimiento de servicios básicos, seguridad y todo lo que sea necesario para los damnificados. Durante la conferencia, García Linera se refirió a cuatro fallecidos, pero hasta ayer a las 23:00 se confirmaron solo dos.

Al terminar la conferencia una madre desconsolada se acercó en medio de los periodistas para dar a conocer a las autoridades que su hija junto a una amiga quedaron atrapadas en su vivienda. “¡Mi hija!, ¡mi wawita está bajo el lodo junto a su amiga!, ¡necesito ayuda, no podemos rescatarlas!”, le dijo a García Linera mientras la autoridad la escuchaba conmovido. El vicepresidente comprometía la ayuda para rescatarlas.

Mientras algunos vecinos rescataban sus pertenencias, funcionarios de la Alcaldía de Tiquipaya brindaban alimentos tanto a afectados como a quienes trabajan en la zona. Esta tarea fue persistente durante toda la jornada. Ayer, a las 13:30, nuevamente el caudal bajó con piedras de gran tamaño hacia las zonas afectadas provocando temor. Así, Defensa Civil declaró 19 municipios en emergencia y 13 en desastre en siete de los nueve departamentos del país.

Analizan las causas

Se manejan dos hipótesis
José Fuentes, técnico de la Alcaldía de Tiquipaya, informó que la caída de un cerro en la cordillera o la ruptura de una represa son las dos probables causas del rebalse del río Taquiña.  


Más de 300 rescatistas
Óscar Soriano, de la Unidad de Gestión de Riesgos de la Gobernación de Cochabamba, dijo que más de 300 personas trabajan  en las tareas de rescate.


Viviendas sepultadas
Se estima que más de 20 viviendas quedaron sepultadas en el lodo y las labores de rescate continúan en el lugar. Las personas se subían al techo para evitar que las lleve el alud.