Este martes la Asamblea Nacional de Venezuela asumió competencias del Ejecutivo y designó un representante ante la OEA, enfrentándose a la decisión del presidente Nicolás Maduro de salir de la organización.

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23 de enero de 2019, 6:52 AM
23 de enero de 2019, 6:52 AM
Juan Guaidó.
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Juan
Guaidó, dijo que el Parlamento planea coordinar "las acciones necesarias para el reordenamiento" de Venezuela.

La Asamblea Nacional (AN) de Venezuela, controlada por la oposición y declarada en desacato por las autoridades judiciales afines al gobierno, anunció este martes que asumía las competencias del Ejecutivo, al que no reconoce.

La decisión del Parlamento supone ahondar en el desconocimiento de la legitimidad del presidente Nicolás Maduro, que tomó posesión de su segundo mandato a principios de enero, y en la profunda crisis institucional que vive la nación sudamericana.

Maduro ganó en mayo pasado unas elecciones en la que no concurrió la mayoría de la oposición por no considerar que hubiera garantías de que fueran a ser limpias.

Por tanto, los miembros de la AN tampoco reconocen su nuevo mandato de seis años y el propio presidente de la Asamblea, Juan Guaidó, declaró a Maduro "usurpador".

Gran parte de la comunidad internacional está de acuerdo, incluyendo a las autoridades de Estados Unidos, la Unión Europea y la mayoría de los países latinoamericanos.

En respuesta, esta semana el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela declaró inconstitucional a la AN y anuló todas sus decisiones, entre ellas las de nombrar a Guaidó como su presidente.

Los jueces consideraron "nulos" los actos realizados por la AN, incluyendo la acusación de usurpación contra Maduro, quien el pasado 10 de enero inauguró su cuestionado segundo mandato, con una jura ante el TSJ.

Pero tres años el mismo TSJ ya había declarado en "desacato" a la AN, luego de que el oficialismo perdiera la mayoría de los escaños en este órgano.

Permanencia en la OEA

Tras autoatribuirse las competencias del gobierno, los parlamentarios designaron a Gustavo Tarre Briceño como "representante especial" ante la Organización de Estados Americanos (OEA), en contraste con la decisión de Maduro de retirar al país del organismo.

Guaidó señaló que la decisión tiene "el propósito de coordinar con esa organización las acciones necesarias para el restablecimiento del ordenamiento constitucional" en el país.

"Seguimos cumpliendo con el compromiso de nuestro Parlamento y nuestra gente, al no dejarla sola en ningún espacio", dijo.

El secretario general de la OEA, Luis Almagro, saludó la decisión de la Asamblea venezolana.

La OEA no reconoce la legitimidad de Maduro en el poder así como tampoco Estados Unidos ni la Unión Europea o los países alineados en el Grupo de Lima.

Aunque es responsabilidad del Ejecutivo designar los embajadores y los jefes de misiones diplomáticas, los legisladores de la oposición consideran que la permanencia de Maduro en el poder supone una "ruptura" del orden constitucional.

Nicolás Maduro.
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Nicolás
Maduro inauguró su segundo mandato presidencial a inicios de enero, en medio de críticas a la transparencia del proceso electoral.

El acuerdo de los diputados de mayoría opositora fue aprobado "casi por unanimidad", aseguró Guaidó.

Con él, la oposición pretende garantizar la permanencia de Venezuela en la OEA.


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