En índices como el de la felicidad, la democracia o la igualdad de género, los países escandinavos suelen estar a la cabeza. ¿Qué tiene esto que ver con una antigua sátira de un escritor de ficción?

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12 de agosto de 2018, 4:45 AM
12 de agosto de 2018, 4:45 AM
Familia escandinava
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En
los índices de felicidad y bienestar, los países escandinavos figuran entre los primeros.

Cuando se trata de indicadores como el índice de la felicidad o de democracia, o estadísticas para medir la desigualdad de género, los países nórdicos suelen destacarse en los primeros lugares.

Y en el imaginario popular, al menos, las naciones escandinavas son un mundo apacible, tranquilo, igualitario, donde la vida fluye sin mayores inconvenientes.

Pero haciendo a un lado las políticas gubernamentales o las medidas económicas que permitan que algo de esto sea posible, ¿hay algo intrínseco en la cultura escandinava que influya en este modelo de vida que se percibe como exitoso?

Al parecer sí lo hay y se llama Ley de Jante.

Un código aprendido por casi todos

La Ley de Jante es una suerte de código de comportamiento que la gran mayoría de los individuos en estas sociedades tiene internalizado.

Tablas
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Los
principios de la Ley de Jante son algo así como los diez mandamientos.

Son diez mandamientos que casi todos los escandinavos aprenden de pequeños que tienen como objetivo desalentar el desarrollo de la superioridad individual y la ambición.

"No debes pensar que eres algo especial", dice el uno. "No debes pensar que tú eres bueno en algo", dice otro.

"A los escandinavos cosmopolitas les encanta decir que la Ley de Jante es algo para la gente de la provincia. Pero existe en cada ciudad y afecta a la gente en los autos que elige, en cómo se viste y en cómo se comporta", le explica a BBC Ideas Michael Booth, autor del libro "El pueblo casi perfecto: la verdad del milagro nórdico".


Los 10 mandamientos de la Ley de Jante

  • No debes pensar que eres algo especial
  • No debes pensar que eres tan bueno como nosotros
  • No debes pensar que eres más inteligente que nosotros
  • No debes imaginarte que eres mejor que nosotros
  • No debes pensar que sabes más que nosotros
  • No debes pensar que eres más importante que nosotros
  • No debes pensar que tú eres bueno en algo
  • No debes reírte de nosotros
  • No debes pensar que le importas a alguien
  • No debes pensar que puedes enseñarnos algo

Mientras que la sociedad británica, por ejemplo, tiene "una distinción de clase por la que puedes hacer muchas cosas porque eres rico o porque tienes antepasados importantes, lo la que Ley de Jante está tratando de decir es: ´No, no puedes, porque aquí hay mucha gente y nosotros decidimos las reglas, no tú solo´, señala Kim Kantardjiev, asesor de educación noruego.

"Y creo que esa es la clave para explicar por qué tenemos un índice alto de igualdad y felicidad, porque el conflicto es mucho menor cuando todos aceptan que no pueden hacer lo que quieren", agrega.

De la sátira a la realidad

¿De dónde surgieron estos mandamientos? Ni de la filosofía, ni de la religión: tienen su origen en una obra de ficción del escritor danés-noruego Aksel Sandemose.

Aksel Sandemose
BBC
Los
preceptos de la Ley de Jante son parte de una novela de Sandemose escrita como una sátira.

"Un refugiado sobre sus límites" (1933) era en realidad una sátira sobre la vida en Jante, una ciudad ficticia basada en Nykøbing, una ciudad sueca en la que Sandemose trabajó como maestro.

"Pensó en la mentalidad que primaba allí y la cristalizó en el concepto de Janteloven (o Ley de Jante)", le explica a BBC Ideas Kirsten Shepherd-Barr, profesora de Literatura de la Universidad de Oxford, Reino Unido.

En la ciudad de la novela, "todo lo que uno hace y parece fuera de lo común, ambicioso o no conformista, es castigado y mirado con desprecio por la comunidad", añade.

Según Booth, con el paso del tiempo, estos preceptos "se transformaron en algo así como los diez mandamientos escandinavos informales".

"El aspecto satírico ha sido casi olvidado y la gente cree de alguna manera que así es como debe comportarse".

Críticas

Sin embargo, no todos están de acuerdo, y en Escandinavia ha surgido una tendencia en los últimos 10 o 20 años a rechazar la Ley de Jante.

Integrantes de la banda Sassy 009
BBC
Para
las integrantes de la banda Sassy 009, estas leyes son muy restrictivas.

"Muchos la encuentran bastante opresiva, limitante y sofocante", explica Booth.

"Yo quiero hacer mis propias cosas, de la forma en que a mí me parezca, sin que me consideren una marginada social", explica Johanna Scheie Orellana, integrante de la banda Sassy 009, en contra de la Ley.

"Creo que puede ser una suerte de prisión porque no estimula la grandeza", dice otra de las jóvenes del grupo.

En Noruega, hay incluso una tumba donde yace la Ley de Jante.

Leyes para reflexionar

¿Se convertirán estos diez mandamientos eventualmente en algo del pasado?

Muchos creen que no, que estas ideas están demasiado internalizadas.

"Siempre están allí", dice con expresión resignada Ibsen Sandemose, nieta del escritor y autora e ilustradora de un libro sobre su familia.

Pueblo en Noruega.
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Este
paisaje en Noruega encarna la uniformidad promovida por la Ley de Jante.

Para Shepherd-Barr, "esta forma de pensamiento puede estar tan profundamente enraizada que no desaparecerá".

Pero lo bueno, destaca, "es que la Ley de Jante te obliga a pensar en cuáles son esas reglas tácitas que gobiernan tu vida".

"Y ese es el primer paso hacia la libertad, hacia el abandono de esas reglas".

En opinión de Kantardjiev, lo que se debería hacer "es elegir de entre todas las reglas aquellas que hacen a una sociedad mejor".

La de no pensar que uno es mejor que el resto, dice, es probablemente la que permita organizar una sociedad mejor.


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