cara a cara

 ¿Habría aceptado el Gobierno de Evo Morales una ley de garantías para el ejercicio pleno de los derechos constitucionales como la que pretende aprobar el MAS, haciendo uso de los dos tercios que tiene en el Congreso? Los hechos demuestran que no. 

Los dirigentes sindicales que criticaron la gestión del MAS, así como muchas autoridades y exautoridades, fueron perseguidas, acusadas y apresadas durante años por tener una visión diferente a la que predominaba en el poder. 

La norma que está en debate habla de indemnización a las víctimas de la crisis social que hubo en Bolivia y eso ya fue aprobado en un decreto. 

Plantea salvoconducto para quien lo pida, pero soslaya que hay ex ministros asilados en embajadas que están siendo acusados de delitos que causaron dolor en el país y personajes a quienes se debe investigar por el fraude electoral. 

Tampoco se puede liberar a detenidos si cometieron atentados y otros delitos. Es bueno tener todo el panorama, de manera que no se utilicen valores universales para englobar a quienes deben ser investigados y castigados si son hallados culpables.

 Aún es tiempo de que los posibles candidatos a la Presidencia del país honren al pueblo haciendo política de una manera diferente. Es oportuno hacer la reflexión para que quien aspire a gobernar sepa que su única misión es servir y transformar Bolivia. Será lamentable si los egos y el afán personal o sectorial son los que dictan las acciones. Hubo un sacrificio popular que merece actitudes renovadas.