La ministra de comunicación los convoca a Palacio. Los dirigentes afines al MAS dicen que se radicalizarán. Otros distritos de El Alto exigen que los dejen trabajar

18 de noviembre de 2019, 4:00 AM
18 de noviembre de 2019, 4:00 AM

El Alto está dividido y surge una invitación a dialogar del Gobierno. Hay sectores de la población que tienen una sola consigna: que renuncie la presidenta Jeanine Áñez. Pero otros, que no son minoritarios, aplauden el paso de las Fuerzas Armadas, marchan, piden paz y que los dejen trabajar.
La ministra de Comunicación, Roxana Lizárraga, anunció conversaciones preliminares, y leyó una carta en la que invitó a los alteños movilizados a una mesa de trabajo “para atender sus respectivas demandas que permitan pacificar y recobrar el orden social en nuestra amada Bolivia”. Al final les pidió que ellos fijen fecha y hora, pero pidió que el encuentro sea en Palacio de Gobierno. 

El sector más radical está ubicado en el distrito 8. En ese territorio está la planta de Senkata, desde donde salen los camiones cisternas que abastecen de combustible a la ciudad de La Paz.

Se ha extendido también a Ventilla y al Puente Vela, lo que imposibilita que los buses de transporte interdepartamental puedan tomar rutas alternativas que les permitan salir hacia Oruro y otros departamentos del país.

Los dirigentes, al tomar ese punto, han sacado los restos de las rieles de tren que atravesaban la avenida, y las han convertido en una barricada que impide el paso por la avenida 6 de Marzo. Además, cavaron zanjas en cuatro puntos estratégicos, lo que hace imposible el tránsito de motorizados, y menos los de alto tonelaje que transportan la gasolina.

La caminata entre Senkata y Puente Vela toma al menos una hora. Ayer, los dirigentes hicieron un cabildo en el segundo punto. Cuando se comenzaban a analizar los temas, se anoticiaron de que los militares habían logrado ingresar a la planta.

Retornaron rápidamente a Senkata y se apresuraron en rodear la planta. Reforzaron el control en el perímetro y en ese punto iniciaron su reunión.
El cabildo de juntas vecinales de El Alto y representantes campesinos de las 20 provincias de La Paz determinó el bloqueo de carreteras y calles.

El siguiente objetivo que se plantearon es tomar el aeropuerto, desconocieron a los presidentes de las juntas vecinales porque les criticaron que no pueden aglutinar una sola línea en las medidas de presión, y acordaron no parar con los bloqueos hasta que renuncie la presidenta y retorne el expresidente de México.

Exigen también otros puntos: Renuncia de la alcaldesa de El Alto Soledad Chapeton, inmediata liberación de los detenidos en las movilizaciones a escala nacional, desconocimiento de Fejuve El Alto, de parte de los 14 distritos, repliegue inmediato de los militares a sus unidades, que la Policía se reivindique con su pueblo para La Paz, expulsión de Carlos Mesa, Luis Fernando Camacho, Marcos Pumari, Waldo Albarracin, Rafael Quispe por incitar a la violencia, y pedir a la prensa que difunda la realidad de los saqueos.

El nombrado presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Choque, señaló que “en la movilización de El Alto las bases ya rebasaron a los dirigentes, los desconocieron y ya no es posible controlarlas”.

Pero pese a que este sector advierte que son 14 distritos los que apoyan la medida, hay otros barrios alteños que la repudian con manifestaciones y a través de distintas plataformas digitales. Se pudo conocer que al menos en Ciudad Satélite y la ruta hacia Copacabana, hubo marchas pidiendo la pacificación.

Se difundieron videos del paso de militares por distintos puntos de esta ciudad, donde fueron recibidos con aplausos.

La actividad comercial, ayer, en la Ceja de El Alto, como en el sector de la feria 16 de julio no fue nula, hubo movimiento. De hecho, este medio pudo confirmar que al menos la línea Morada y la Amarilla del teleférico, volvieron a funcionar con normalidad.

“No nos digan que todos apoyamos al MAS, esto no es como el 2003 que todos estábamos unidos para que se vaya el gringo (el expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada). Protesten pero háganlo en paz. No nos perjudiquen, nosotros queremos trabajar”, declaró un dirigente de Santago II, Juan Quispe. Ese tipo de opiniones se repitieron en las redes sociales.

El comandante de la Policía, Montero señaló que “el comandante general de El Alto está abriendo un diálogo (...) para abrir la Planta de Senkata y poder trasladar a La Paz el combustible necesario para poder normalizar la ciudad”.