Son 57 las unidades educativas que suspendieron las clases debido a la emergencia medioambiental que atraviesa este municipio

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20 de agosto de 2019, 15:14 PM
20 de agosto de 2019, 15:14 PM

Después de una reunión de evaluación técnica en la que participaron personeros de la Dirección General de Medioambiente de la Alcaldía de Santa Cruz y autoridades educativas de Roboré, se acordó suspender las labores educativas en las 57 unidades educativas de la población chiquitana. 

A decir de la directora distrital de Educación de Roboré, Olga Bress Rivera, la decisión fue asumida en coordinación con las autoridades de educación de los niveles departamentales y nacionales después de que la medición de índice de calidad del aire arrojará cifras en un rango de 'muy malo y extremadamente malo', lo que pone en riesgo la salud de los 54.000 estudiantes. 

En el anuncio de suspensión de clases estuvo presente la presidenta del Concejo Municipal de Santa Cruz, Angélica Sosa, que llegó con medicamentos, alimentos, alcohol en gel, agua y barbijos para que se distrbuyan a la población estudiantil.

En el área rural 

El humo y calidad del aire empiezan a pasar factura a los escolares en la unidad educativa Santiagoma. Según la profesora, Dione Cleydi Dorado, la intensa humareda proveniente de los focos de incendios activos ha empezado a complicar la salud de los niños, sobre todo, de aquellos que presentan resfrios. 

Dio cuenta de que por un tema de prevención y para evitar aún más el deterioro del estado de salud de los menores, se debería declarar una pausa en la escuela hasta que se disipe la alerta por incendio. "Los niños están respirando humo", subrayó.

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