Así se moverá tu vehículo en el futuro
Encontrar energía alternativas es el principal objetivo de la industria automotriz a escala global. De paneles solares a electricidad a base de hidrógeno, la tecnología permite soñar y crear
En 1953 Ford presentó el Nucleon, un prototipo de vehículo a base de energía atómica. Eran los años 50 y Chernobyl era una palabra todavía desconocida. Parecía una buena idea. Lo cierto es que, desde hace varias décadas, la industria automotriz busca alternativas a su dependencia de combustibles basados en recursos no renovables. Por ello es que desde todas las latitudes del planeta y con diferentes conceptos, tecnologías y metas, los vehículos en base a energías renovables, verdes o no contaminantes, se multiplican en busca de la respuesta a la pregunta clave: ¿cómo se impulsará el auto del futuro?
“En Bolivia estamos muy atrás en cuento a la implementación de otros combustibles o el uso de autos eléctricos”, explica Luis Yañez, gerente de asistencia técnica de Imcruz y uno de los responsables en la llegada de los primeros vehículos eléctricos a Bolivia: tres Renault Kangoo que llegaron por pedido de CRE. “Aprovechando este pedido, trajimos una Kangoo más para hacer pruebas de resistencia en Bolivia, y las cuales superó con gran performance en la altura y geografías difíciles”, explicó.
La importadora destacó que ya tiene otro modelo, el Renault Twizy, y que el próximo año traerá otro modelo más. “Hacen falta políticas de incentivo como las que realizan otros países: facilidades impositivas y también inversión en infraestructura, como las electrolineras (estaciones de servicio de autos eléctricos) que ya son comunes, incluso en países vecinos”, enfatizó Yañez, quien no dejó de sentirse orgulloso de que Renault haya realizado el hito histórico de ser el primer auto eléctrico en el país. Los autos eléctricos, que ya son el presente de la industria, pero existen múltiples ideas con nuevas -y asombrosas- alternativas:
Energía solar: En la última década las carreras de autos solares se han multiplicado en todo el mundo, convirtiéndose en plataformas para probar y mostrar nuevas tecnologías. En 2018, el vehículo Inti III, de un equipo de jóvenes ingenieros y mecánicos bolivianos salió segundo en su categoría en la Carrera Solar Atacama. En esta competencia, el vehículo boliviano recorrió 2,600 kilómetros de ruta atravesando el desierto en cuatro días. En el mundo de las grandes automotrices, la compañía holandesa Lightyear, presentó la semana pasada el prototipo Lightyear One, que según el fabricante, ya fue testeado y logró 750 kilómetros de autonomía con sus cinco metros cuadrados de paneles solares y un precio que rondará los 180.000 dólares.
Agua y sal: Quizá sea la propuesta más difícil de creer, sin embargo, va ganando fuerza rápido con prototipos que ya recorren las rutas de Europa. Son vehículos a base de una solución electrolítica salina (o incluso simple agua salada) almacenada en tanques y que al pasar por una membrana genera energía eléctrica. Quantino, un vehículo de la empresa alemana Nanoflowcell, lleva recorriendo el viejo continente con esta tecnología desde 2016. Según la firma alemana, ya lleva 10.000 horas de conducción y más de 350.000 kilómetros recorridos.
Hidrógeno: Firmas como Audi y Volkswagen ya han producido varias generaciones de vehículos a hidrógeno. Estos son carros que convierten hidrógeno en agua y generan energía en este proceso. En 2018, Audi presentó su modelo H-Tron Quattro. Bajo el capó de este vehículo se tiene una pila de combustible que convierte el hidrógeno en agua y que obtiene electricidad en este proceso. A diferencia de un auto eléctrico común, este no utiliza una batería como fuente de poder y almacenamiento, sino que el hidrógeno es el combustible y la pila el “motor” que logra los procesos para obtener energía de este. Entre otros, hay proyectos con energía kinética, calórica e incluso ideas radicales con física cuántica. La humanidad ya se demostró que todo sueño es posible.