El exministro de Gobierno reconoce que no se ponen de acuerdo y parafrasea el regreso de la ‘Guerra Fría’. Desde 2012, ha presidido dos veces el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas

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29 de abril de 2018, 4:00 AM
29 de abril de 2018, 4:00 AM

Son las 15:15 del miércoles 18 de abril en Nueva York. La cita estaba prevista 15 minutos antes, pero La Gran Manzana tiene el segundo peor tráfico en el mundo. Así que conseguir un taxi puede demorar hasta una hora y media y aunque las distancias no sean extensas la cantidad de vehículos dificulta el viaje.

En el 801, 2nd Ave, entre 42st y 43st está la oficina de Sacha Llorenti Soliz, embajador de Bolivia en la Organización de las Naciones Unidas. A dos cuadras de la Sede de la ONU. Está en el cargo desde agosto de 2012. Se lo nota nervioso, un tanto preocupado. Preguntamos: El presidente Evo Morales estuvo en Nueva York esta semana ¿a qué se debió su visita? ¿Cómo le fue? Interrumpe la entrevista y sale de su oficina.

Minutos después retorna. Se acomoda en la silla. Otra vez preguntamos: ¿Qué resoluciones impulsó Bolivia en el marco del Consejo de Seguridad de la ONU? Llorenti se para por segunda vez y busca al comunicador que trabaja con él, Edson Hurtado. Consulta si había preguntas previas a la entrevista. Hurtado le explica que no, que recibió un cuestionario de otro medio de comunicación que lo contactó desde Bolivia.

Luego el comunicador justifica: “Comprenderá que el embajador anda muy ocupado, primero el tema marítimo y ahora el ataque a Siria”. Llorenti pide que Hurtado se quede en la sala durante la entrevista. Entonces, volvemos a preguntar:
 
Bolivia rechaza los bombardeos en Siria y dice que no hay pruebas de un ataque químico en Duma. ¿Qué dice de los otros ataques con armas químicas que sí realizó el régimen de Bashar Al Asad?

¿Por ejemplo? ¿Cuáles? 

Embajador, hay noticias internacionales y fotos en las que se refieren a los ataques con armas químicas por el régimen en Siria…

A ver, primero nosotros rechazamos el uso del término régimen. Es un apelativo que han utilizado quienes están financiando a grupos opositores en Siria. Segundo, no se trata de que nosotros apoyemos o no a Siria, lo que estamos haciendo es exigir una investigación en este y en cualquier otro caso. Una investigación independiente, imparcial, completa y concluyente. Que sea un organismo profesional y técnico el que determine las circunstancias y las responsabilidades de estos ataques, si es que se han producido.

Nosotros hemos rechazado categóricamente el ataque unilateral porque según la Carta de las Naciones Unidas todo uso de la fuerza solo se puede dar en dos circunstancias. Uno, cuando se trata de una legítima defensa y dos, cuando ese uso de la fuerza esté debidamente autorizado por el Consejo de Seguridad, pero ninguna de esas dos circunstancias ha motivado el ataque unilateral de EEUU, Francia y Reino Unido a Siria; por tanto, es ilegal en el marco del derecho internacional y nosotros tenemos la responsabilidad de defender la Carta de las Naciones Unidas. 

Sin embargo, se reportaron ataques con uso de armas químicas…

Bolivia condena el uso de armas químicas sin ningún tipo de relativización; es decir, en todos los casos y en cualquier circunstancia. Los ataques con armas químicas pueden ser crímenes de guerra y los responsables tienen que ser sancionados, pero para ello precisamos una investigación clara, independiente e imparcial. Lo que sucede es que quienes acusan al Gobierno sirio no son actores independientes, son quienes financian a los grupos opositores y les dan armas. Entonces, creo que desde una perspectiva más ecuánime lo que se debe hacer es esperar el resultado de una investigación más imparcial. 

¿Quiénes usted considera que pueden hacer una investigación imparcial?
Antes de que llegue una misión de la OPAC (Organización para la Prohibición de Armas Químicas)-estaba en camino a Damasco- y antes de que llegara a Siria se produjeron estos ataques. Ahora, esta misión está en Siria y esperamos que realice la investigación.                                                      
El Consejo de Seguridad no se puso de acuerdo respecto de Siria.

¿Es inútil esta entidad para resolver los grandes conflictos internacionales?

Se plantearon tres resoluciones, ninguna fue aprobada. Existe una división en el Consejo de Seguridad, el propio secretario general hablaba del retorno de la Guerra Fría al consejo, lo que hace que sea cada vez menos eficaz, menos eficiente el Consejo de Seguridad y que no cumpla la responsabilidad que tiene de mantener la paz y seguridad internacionales. 

Es por eso que nosotros insistimos en que estos casos debe haber unidad en el Consejo de Seguridad, pero lo que al final sucede es que se utiliza como si fuera una caja de resonancia de la guerra, como un peón en el tablero de ajedrez de la guerra y las divisiones son un reflejo de lo que sucede en el campo de batalla allá en Siria. 

El rol de la ONU sigue desdibujado en medio de la globalización, donde sigue rigiendo la ley del más fuerte. ¿Qué cambios se están pensando para hacerla más efectiva?

Las NNUU en general continúan siendo un proyecto en construcción. El establecimiento de un orden mundial basado en reglas está todavía distante, lo que pasa es que algunas potencias se creen por encima del derecho internacional, sobre todo las que más armas tienen y eso debilita el orden internacional porque al estar por encima del derecho internacional creen que pueden hacer lo que quieran.

En este caso EEUU, que no ha firmado la gran mayoría de los convenios sobre derechos humanos, ni ha ratificado el Estatuto de Roma, le dio la espalda al Acuerdo de París, se ha alejado de las negociaciones sobre el Pacto Global de Migración, ha declarado unilateralmente a Jerusalén como capital de Israel en contravención a numerosas resoluciones del Consejo y la Asamblea General de la ONU. Una serie de atentados contra el derecho internacional. En tanto no exista igualdad de condiciones entre los estados y no se cumplan los principios y propósitos que hablan sobre la igualdad soberana de los miembros de NNUU. Entonces, el sistema multilateral se verá debilitado y quedará un largo camino por recorrer.

¿Qué resoluciones impulsó Bolivia en el marco del Consejo de Seguridad de la ONU?

Bolivia ingresa al Consejo de Seguridad de la ONU como un miembro electo; es decir, 183 Estados han votado a favor del país para que pueda participar en esta que es la mesa más alta de la diplomacia mundial. La primera presidencia se dio en junio de 2017 y ahí impulsamos varios temas, entre ellos la no proliferación de las armas de destrucción masiva, la situación de Palestina, hicimos un debate sobre acción contra las minas. Por iniciativa de Bolivia aprobamos la primera resolución en la historia del Consejo de Seguridad de la ONU sobre una acción contra las minas. 

¿Y el trabajo en la región?

A lo largo de este año apoyamos el proceso de paz en Colombia y la situación en Haití. Durante nuestra presidencia llevamos adelante una misión específica del consejo hacia Haití con reuniones al más alto nivel, incluso con el presidente de Haití para ver de qué manera podíamos contribuir a mejorar la situación en ese país hermano.

Aunque no puede sonar muy bien que yo lo diga como embajador en Naciones Unidas, pero la presencia de Bolivia en el Consejo de Seguridad no ha pasado desapercibida. Es una presencia muy activa, basada en la defensa de los principios y propósitos de la Carta de las Naciones
Unidas, la defensa del multilateralismo, la defensa de la integridad territorial, la soberanía, la independencia de los estados, como elementos fundamentales del orden mundial al que aspira el sistema de la ONU.

¿Qué beneficios concretos le trajo a Bolivia su participación en el Consejo de Seguridad de la ONU?
Tal vez corresponda a otras personas responder a esta pregunta, pero creo que Bolivia no solo en su presencia en el Consejo de Seguridad, sino que en esta última década tuvo un repunte en su política exterior gracias al mandatario Evo Morales. Eso se debe al liderazgo del presidente Evo Morales, es el primer boliviano universal. Él hizo que contemos con una diplomacia verdaderamente soberana e independiente. Además, Bolivia da ejemplo en temas económicos y sociales en el mundo, en términos de inclusión y lucha contra la discriminación.

Insisto, ¿en qué se benefició Bolivia?
Creo que más que un beneficio es un servicio al resto de la comunidad internacional. Nosotros servimos, representamos a toda la membresía en el Consejo de Seguridad de la ONU, creo que lo hicimos siguiendo los principios y propósitos de la carta de NNUU, pero segundo, creo que Bolivia tiene un rol protagónico en el mundo. Eso debemos reconocerlo porque nos ayuda a una mayor visibilización del país. 

Perfil Sacha Llorenti Soliz

Sacha Llorenti Soliz llegó a presidir la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) durante el reciente periodo de sesiones. Desde enero está en el Consejo de Seguridad y evalúa aquí los desafíos que le ha tocado sortear en estos meses. Es un defensor del multilateralismo.

Nació en Cochabamba el 13 de marzo de 1973. Es abogado especializado en derechos humanos. Actualmente, embajador de Bolivia ante las Naciones Unidas. Representa al país ante la ONU desde el 5 de septiembre de 2012. Tras ejercer como viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, llegó a ser ministro de Gobierno. En enero, el Gobierno lo designó coagente del Estado Plurinacional en la demanda marítima.