Destaca que no se educa caminando de espaldas a la historia y que la innovación exige ver realmente cuáles son las necesidades, retos y desafíos que se deben cumplir

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21 de enero de 2018, 4:00 AM
21 de enero de 2018, 4:00 AM

1. ¿Por qué es importante reflexionar sobre la educación en estos tiempos?
La educación siempre ha representado el paso a una mejor forma de vivir. Desde el hombre de las cavernas que enseñaba a sus hijos en familia la estrategia de cazar o pescar hasta ahora el internet como una nueva infraestructura de comunicación y acercamiento de los pueblos. 

A lo largo de los siglos se ha estructurado la escuela. Desde los pedagogos en Grecia, a las escuelas de culto con los Hebreos, hasta el sistema escolar. 

En este proceso de “creación de la escuela” como hoy la conocemos,  un rol protagónico ha tenido la Iglesia católica, y es urgente reflexionar y repensar modelos educativos y formas de educar para los educandos de nuestro tiempo. 

2. ¿Qué rol juega el docente en la transformación de la educación?

El “pedagogo” como lo llamaban en la antigua Grecia o el “Educador” en terminología actual es un personaje clave en el proceso educativo. 

El educador es orientador, traza líneas, anima, motiva, propone modelos de vida, suscita intereses, promueve capacidades, explora y hace relucir las riquezas propias de cada educando, está siempre listo para agarrar la mano de quien necesite un soporte, como buen trapecista, camina al lado de sus estudiantes para comprender sus pasos, ser atento a sus emociones, acompañarlos en los momentos más importantes, compartir sus logros y alegrías, animarlos en las situaciones de debilidad o frustraciones, para ayudarlos a crecer fuertes y equilibrados.  

3. ¿Cómo se entiende la innovación en el campo educativo?
Educar es caminar con la historia. No se educa caminando de espaldas a la historia, eso es retroceso, es morir. 
Innovar por tanto exige auscultar la historia; comprender cuáles son realmente las necesidades, los retos, los desafíos que la persona está llamada a cumplir en un determinado contexto histórico y cultural. Eso significa educar para la vida. La escuela y el oficio de educar son  fuertemente ligados a la vida de los individuos y a sus sociedades. Innovar significa entonces responder con propiedad, competencia y calidad para aportar a la belleza de la  humanidad de acuerdo a sus necesidades reales y proyectadas hacia el futuro. 

4. ¿Hasta qué punto es importante la tecnología en la revolución del aprendizaje? ¿Cómo aplicarla?
Se dice que nuestros niños y adolescentes son “nativos digitales”. Desde esa perspectiva es importante tener en cuenta la tecnología para su proceso de aprendizaje. 

En la aplicación de la tecnología hay que crear una verdadera didáctica para hacer que su utilización sea realmente provechosa ampliando y mejorando los niveles de atención y participación por parte del estudiante. Esto requiere que los educadores se capaciten adecuadamente y sean auténticos orientadores en el uso de la tecnología, limitando a tiempos reales su utilización y no dejándolo al libre arbitrio del estudiante.
En este sentido una participación importante es la de los padres y madres que están llamados a controlar los tiempos y la forma de utilización de todo tipo de aparato tecnológico. 

5. “Ser creativos o morir” - parece ser la consigna actual- ¿Cómo lograr aulas creativas?
La temática de creatividad es como una tarea siempre pendiente dentro de nuestro quehacer educativo. 

Dejar en libertad la creatividad de los niños en edad preescolar, educar y fomentar creatividad en los otros niveles escolares es la clave para tener personas exitosas e innovadoras. 

Lamentablemente nos hemos acostumbrado a ciertos niveles de comodidad y estereotipos. Por ejemplo creemos que un kínder es mejor si el niño aprende a leer y escribir. Eso es falso. En esa etapa los niños deben desarrollar otros tipos de habilidades, sociales, afectivas, emocionales, psicomotrices, de relación con el entorno, etc. No es bueno someterlos a tareas ajenas a su propio desarrollo evolutivo. Cuanto más los niños son felices y hacen cosas agradables a esa edad tanto mejor responderán cuando sean adultos. Necesitamos volver la escuela un espacio agradable para los estudiantes. 

6. ¿Cómo alcanzar la ansiada calidad educativa? ¿Todo pasa por mayor presupuesto?
Ciertamente el presupuesto es un punto importante, porque la educación necesita de equipamientos adecuados, herramientas oportunas y sobre todo maestros mejor preparados, con clara vocación de educadores. 

Países como Finlandia, que solo un par de décadas atrás estaban más o menos como nosotros y que ahora están en la cúspide mundial de la calidad educativa, sugieren que aportar calidad educativa pasa por una decisión política de los ciudadanos. 

7.-Educación es sinónimo de desarrollo ¿es verdad?
Absolutamente sí. La humanidad ha desarrollado cada vez nuevos conocimientos y ha logrado mejor calidad de vida, a partir de la educación. 

8.- ¿Métodos, estrategias, paradigmas, reformas? ¿Cuál es la clave del cambio?
Creo profundamente que la clave del cambio está en los educadores. Las reformas recogen paradigmas educativos que muchas veces están de moda, más el cambio verdadero lo hacen las personas que se dedican a educar con pasión. 
Definir la clave del cambio es “educar con pasión”. 

9.- Políticas educativas ¿Hacia dónde deben apuntar?
Recojo aquí el significado literal de la palabra “políticas” que es “el bien de la ciudad” o, en sentido más amplio, de los ciudadanos. Entonces las políticas educativas deben apuntar al bien de los ciudadanos de una determinada época histórica, de una determinada cultura. 

10.- ¿La receta de Finlandia, la receta de Singapur, de Japón? ¿Existe una receta que funcione en Bolivia? ¿Es cuestión de recetas?
No creo que en educación existan recetas. Ciertamente hay métodos educativos o pedagógicos que han sido luz para muchos. 

Pienso y anoto algunos apuntes que pueden hacer una mejor educación: crear clima ambiental propicio para el aprendizaje; dejar que el estudiante exprese toda la riqueza que tiene desde su propia vivencia; acompañar y fortalecer la labor educativa con buenos textos escolares que los ayuden a una mejor comprensión y los estimulen a seguir investigando; ser atentos y tener en cuenta las emociones de los estudiantes, por ahí empieza el aprendizaje; crear espacios de reflexión y atención, de escucha e interioridad, es el camino para educar personas creativas e innovadoras; utilizar adecuadamente la tecnología para sintonizar con el mundo propio de los estudiantes;  y se necesitan educadores que sean apasionados por su labor y por la vida. 

Feliz viaje en esta travesía de un nuevo año escolar.