Alrededor de las 9:00 del viernes, en Colpa Bélgica (42 km al norte de la capital cruceña), una mujer llamó a la Policía de la zona y denunció que estaba siendo agredida por su marido, por lo que los sargentos Égdar Antonio Nao Colchoza y Juan Revollo Encinas acudieron al lugar con la intención de intervenir en el caso, pero acabaron agredidos por la misma denunciante, por su esposo y por su hijo, según fuentes oficiales.

El comandante de la Policía, Alfonso Siles, y el director de la Felcc, Gonzalo Medina, no detallaron qué llevó a la supuesta víctima, Patricia Claros Chávez (37) a agredir a los agentes, en especial al sargento Nao, de 60 años de edad, al que lanzó un ladrillazo, según la Policía.

Encima, los uniformados fueron golpeados por Wilman Álvarez Mejía (41) y su hijo Wilman Aníbal Álvarez Claros (20), esposo e hijo de la denunciante, quienes, además, fueron al puesto policial del pueblo y lo rociaron con gasolina con la intención de prenderle fuego. Empero, algunos vecinos evitaron un daño mayor y otros se limitaron a filmar el hecho con sus celulares.

Poco después, los autores abandonaron Colpa Bélgica, pero la Policía armó un operativo y los ubicó cerca de la medianoche en Satélite Norte, en posesión de un arma de fuego calibre 22, con cuatro proyectiles.

Los sindicados fueron puestos a disposición de la Felcc de Montero y se les abrió causa por los presuntos delitos de tentativa de homicidio, lesiones graves y portación de armas.

Entretanto, los policías agredidos recibieron atención médica, en especial el policía sexagenario que cumplía su último destino laboral en Colpa Bélgica, pues posteriormente le tocaba acogerse al beneficio de la jubilación.