La segunda versión del festival gastronómico y cultural Ishanka se realiza este sábado en la plaza principal del pueblo. Se puede degustar platos y manjares como  sopa tapada, cordero a la cruz, pato a la parrilla, manjar blanco, bizcochos de maíz, tablillas de maní, entre otros. 

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3 de noviembre de 2018, 16:04 PM
3 de noviembre de 2018, 16:04 PM

Ishanka, que en lengua besiro quiere decir pasión, es el evento que resultó de un convenio con España, y que sigue en pie gracias a las gestiones del Gobierno Municipal de San Javier y de la Cámara Hotelera, con el afán de revalorizar los sabores chiquitanos y de que los visitantes conozcan a este lugar como algo más que un pueblo de paso, como una cuna de identidad aún intacta.

La segunda versión del evento gastronómico y cultural contó con el apoyo de la Gobernación de Santa Cruz y del Cepac y tuvo como invitados especiales a chefs bolivianos y extranjeros, además de la participación de los artesanos, hoteleros, dueños de restaurantes y emprendedores, que expusieron su producción y que hicieron recetas en vivo, para que el público aprenda más sobre los sabores del lugar.

Sopa tapada, capirotada, pacumutos, cordero a la cruz, majadito, pato a la parrilla, arepas, manjar blanco, chimas, bizcochos de maíz, cuñapé abizcochado, tablillas de maní, empanizao y un montón de delicias fueron ofrecidas a los visitantes, entre los que también había extranjeros.

El alcalde Armando Barbery, acompañado de autoridades de pueblos vecinos, el subgobernador, la directora departamental de turismo y otras autoridades, dio por inaugurada la cita y después invitó a todos a participar en la ronda bailable que se armó con las melodías de la tamborita.

Desde tempranas horas de la mañana, San Javier revivió sus tradiciones con el momento de la ambrosía, y luego con su feria gastronómica, que además tuvo la preparación en vivo de las recetas de las 'mamas' (ancianas chiquitanas) y del queso, que ha convertido por su calidad a San Javier en la capital de este producto. Por eso mismo el alcalde felicitó públicamente a la empresa Guapurutú, que hace poco ganó el título de mejor queso muzarella del país, durante un festival realizado en Tarija.

El momento emotivo llegó con la lectura pública de una carta enviada por los primeros gestores españoles del Ishanka, que uno por uno agradecieron a los involucrados, y los emocionaron al rememorar anécdotas de cuando estuvieron en Bolivia.

Por la noche, el festival cerrará en la iglesia con un concierto del coro y la orquesta del municipio, será toda una experiencia barroca.

Está actividad es la antesala del 3  de diciembre, cuando San Javier tendrá su fiesta  patronal con feria productiva  ganadera y celebración generalizada en la plaza principal. La más antigua de las misiones jesuíticas instaladas en Chiquitos trabaja para potenciar su turismo y disfruta de esta su época alta.

"Me sorprendió la identidad cultural de la zona y la gastronomía es uno de los pilares bajo los que se rige está identidad", dijo Fernando Catalán Cerda, chef español invitado.

"Queremos mostrar de lo que son capaces las manos de pueblo adentro, queremos dejar de ser un pueblo de paso", dijo Carlos Justiniano, presidente de la Cámara Hotelera de San Javier, dueño del resort San Xavier y uno de los inclaudicables impulsores de Ishanka.