En Warnes, hay chicos que pasan clases en una cocina y a la intemperie. En San Pedro lo hacen sentados en el suelo. En Concepción no se iniciaron las clases

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7 de febrero de 2018, 4:00 AM
7 de febrero de 2018, 4:00 AM

Los problemas en la infraestructura de las unidades educativas y las pugnas internas entre padres de familias y autoridades educativas afectan el inicio de las actividades escolares en algunos municipios de Santa Cruz.

En Warnes, por ejemplo, hay estudiantes que pasan clases en un ambiente destinado para la cocina y otros a la intemperie. Así lo observó ayer EL DEBER, que llegó hasta la escuela Simón Bolívar, de la urbanización Gran Paitití, que tiene 170 estudiantes, y Marco Jiménez Sánchez, en el barrio Coloradillo, con 220 alumnos. 

En la primera unidad educativa, los docentes acondicionaron una cocina para cobijar a los niños de cuarto de primaria, no hay pizarra y  los pupitres están en mal estado.  En el aula del lado pasan clases estudiantes de dos ciclos, los de quinto y sexto de primaria. 

De los seis baños que hay en el establecimiento, solo  funcionan dos. La maleza también está crecida y cubre el área destinada a una cancha.
En la escuela Marco Jiménez Sánchez, la situación es más compleja. Ahí hay 220 estudiantes del nivel primario que están distribuidos en tres aulas. Cuenta con dos baños, pero no funcionan. 

Durante los dos primeros días de gestión educativa, los niños pasaron clases a la intemperie; sin embargo,  los profesores prevén hoy instalar una carpa para dictar clases un poco más cómodos. 

Al respecto, la secretaría de Desarrollo Humano de la Alcaldía de Warnes, Cinthia Suárez, deslindó responsabilidad en este tema. 

Según Suárez, en la escuela Simón Bolívar los maestros de manera arbitraria decidieron utilizar  ambientes no adecuados para pasar clases, mientras que en la Marco Jiménez Suárez, la junta escolar no demandó que se incluyera en el presupuesto operativo anual la construcción de  aulas. Además, indicó que la Alcaldía solo construye aulas en base a los datos del censo estudiantil que da la Dirección Distrital de Educación y según esos datos, las 93 unidades que hay en Warnes dan abasto para los 34.000 alumnos.

Sin embargo, esa versión fue desmentida por la presidenta de la junta escolar, Casilda Ajchacata, quien asegura que la construcción de aulas está paralizada. La representante de los papás aseguran que la construcción de aulas fue contemplado en el POA 2017, pero las autoridades municipales indicaron que no hay dinero.

San Pedro

En la unidad educativa Josefina Saucedo, del municipio de San Pedro, no se iniciaron las clases debido a que un grupo de padres de familia rechaza la designación de Hilda Quispe como directora de dicha escuela primaria. 

Los padres cerraron las puertas del colegio, lo que obligó a varios maestros a buscar lugares para impartir clases. Algunos lo hicieron  debajo de los árboles, sentados en el suelo, mientras que otros, en el coliseo.


En Concepción, las labores escolares aún no se iniciaron porque un grupo de maestros rechaza la designación de Elena Paraguayo Colque como directora distrital de educación. Acusan a la autoridad de actuar con prepotencia y autoritarismo y negarse al diálogo con los dirigentes del magisterio.
 

Niños de la escuela Marco Jiménez Sánchez pasan clases en el corredor