Estaba bebiendo con una mujer y portaba una pistola calibre 9 milímetros de reglamento. Prestaba servicio en la cárcel de Palmasola y estaba en su día libre

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12 de enero de 2019, 4:00 AM
12 de enero de 2019, 4:00 AM

Eran las 2:00 de la madrugada de ayer cuando un policía en estado de ebriedad, en compañía de una mujer, tomó un taxi. Cuando circulaba por inmediaciones de la plaza del Mechero del Plan Tres Mil, el policía discutió con el taxista por la tarifa de la carrrera y porque este se negaba a llevarlo a una zona alejada debido a las condiciones en que la lluvia había dejado las calles.

Ante esa desavenencia, el agente policial, que estaba en su día libre pero portaba su arma de fuego, una pistola calibre 9 milímetros, desenfundó el arma y disparó contra la humanidad del taxista.

Tras cometer el crimen, el agente intentó darse a la fuga, pero otro, al presenciar la escena, intervino para capturarlo y también recibió un disparo que le provocó una herida leve en el dedo de la mano izquierda.

Finalmente, el policía fue aprehendido por sus camaradas del excomando policial del Plan Tres Mil que está al lado de la plaza del Mechero.

Informe oficial

El informe oficial fue brindado por el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), Gonzalo Medina, que identificó al agente policial como Armando Tola Quispe, que tiene el grado de cabo. Detalló que horas antes el policía estuvo consumiendo bebidas alcohólicas en la zona del hecho acompañado de una mujer. Después, tomó el taxi conducido por Omar Castro Beltrán.

Ambos se trabaron en una discusión porque el policía pidió ser llevado por calles a las que el taxista se negó a ir argumentando que estaban intransitables debido a la lluvia que caía en esos momentos, además de que tenía que pagar por el tramo recorrido. Eso enfureció al policía que disparó provocando la muerte del chofer de forma instantánea.

Estaba asignado a la cárcel

Según Medina, el policía Tola Quispe estaba asignado a la cárcel de Palmasola y en su día libre estaba consumiendo bebidas alcohólicas. El jefe de la Felcc calificó el accionar de Tola Quispe como “abusivo e intolerante”.

“Lamentamos que nos toque presentar a un camarada, pero la ley es para todos y ya no hay nada que investigar, todo está claro”, dijo el jefe policial al señalar que el hombre será enviado a la justicia para responder por el crimen.

Afirmó que en este hecho el autor debe someterse a un procedimiento abreviado para asumir su culpa y recibir una pena de 30 años de cárcel.

Dentro de las pesquisas el jefe policial aseguró que la víctima tenía antecedentes penales por robo agravado y por hacer dormir a una mujer suministrándole tabletas. Por esa situación dijo que era buscado por la Policía.

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