El presidente del club Real América manifestó que se defenderá en libertad en un juicio oral y anunció que presentará una querella en contra del diputado Tomás Monasterio y uno de los jueces que dispuso su detención

10 de enero de 2018, 17:17 PM
10 de enero de 2018, 17:17 PM

"Tengo las manos limpias, no soy ningún narcotraficante", así lo afirmó Pablo Ramos quien se encuentra en libertad por determinación de un juzgado desde el pasado 27 de diciembre del 2017, a la espera de que se instale su juicio oral para defenderse por los delitos de transporte de sustancias controladas y legitimación de ganancias ilícitas.

Ramos expresó sentirse amedrentado y con la imagen dañada ante las calumnias lanzadas en su contra. Sostuvo que en el tiempo que estuvo en la cárcel de Palmasola la Fiscalía no pudo establecer ni una prueba de que transportaba droga, razón por la cual salió del recinto penitenciario. 

"Nos veremos la cara con este fiscal durante el juicio oral y tanto él como el diputado Tomás Monasterio tendrán que probar todo lo que dijeron en mi contra, si no lo hacen, nosotros nos querellaremos penalmente", advirtió.

Pablo Ramos reconoció que fue drogodependiente durante muchos años pero que dejó de consumir las sustancias controladas 10 días antes de su aprehensión en noviembre, por lo que tuvo que rehabilitarse a través de un tratamiento con un psicólogo y de medicamentos. 

Consultado si continuará con los negocios, anunció que su empresa de catering SBI se presentará a la licitación del desayuno escolar en el municipio de Warnes y Porongo y que seguirá trabajando con su club para obtener el bicampeonato. 

En contacto con EL DEBER, el diputado Tomás Monasterio indicó causarle sorpresa la decisión de la justicia y no descartó que Ramos fuese liberado gracias a la intervención del ministro de Gobierno Carlos Romero

"Con esta determinación vemos a una justicia benevolente con sus amiguitos. Si Pablo quiere enjuiciarme que lo haga, me tiene sin cuidado pero que primero se defienda por corrupción y narcotráfico. No le tengo miedo a nadie", dijo el opositor.