Tránsito logró la captura del chofer, que dijo no recordar nada sobre el accidente, porque reveló que ese día estaba bajo influencia alcohólica. El rodado estaba oculto y con las piezas cambiadas en un chaperío

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24 de agosto de 2018, 4:00 AM
24 de agosto de 2018, 4:00 AM

Samuel Moye Yuco (41) era un albañil que la noche (alrededor de las 20:00) del miércoles 15 de agosto esperaba micro en la avenida Virgen de Cotoca, entre el séptimo y octavo anillo, cuando fue impactado de forma violenta por un motorizado. El infortunado hombre quedó tendido en la capa asfáltica y su muerte fue casi instantánea, debido a las graves heridas que sufrió en partes vitales del cuerpo.

El conductor que estaba al mando del vehículo que le provocó el accidente, lejos de bajarse para ayudar a Samuel, emprendió veloz fuga con rumbo desconocido y el motorizado apenas fue visto por los transeúntes, por lo que nadie pudo identificar sus características.

El director del Organismo Operativo de Tránsito, José Luis Pereira, informó ayer que después de varias pesquisas que los agentes de su unidad realizaron de oficio, ya que nadie sentó una denuncia por la muerte del albañil, se logró la captura del conductor y el secuestro del motorizado, una vagoneta color plomo con placa de control 3612-DXD.

El conductor fue identificado como Arturo Cosmet Martínez Ramírez (37). “Por este humilde albañil nadie se presentó a reclamar, pero nosotros como institución hemos seguido de oficio todos los días hasta esclarecer el caso por justicia”, apuntó la autoridad policial.

Escondido en un condominio

Pereira explicó que luego de las primeras pesquisas se logró dar con el paradero del motorizado. Estaba escondido, camuflado, en un condominio. En este mismo lugar fue detenido el conductor para ser puesto a disposición de la Fiscalía.

Tránsito evidenció que el vehículo había sido modificado. Ya había sido llevado a un taller de chaperío y le estaban cambiando algunas piezas dañadas, con la finalidad de burlar los controles y simular que nunca estuvo involucrado en un accidente.

En sus primeras declaraciones ante el Ministerio Público, el conductor argumentó que no recordaba nada de lo ocurrido la noche del 15 de agosto, porque reveló que se encontraba en estado de ebriedad. Sin embargo, Pereira explicó que esa versión no hará variar en absoluto su participación en el hecho vial. “Una de las pruebas de que sabía perfectamente del accidente es que llevó el vehículo hasta un taller para cambiarle las piezas y hacerlo chapear para esconder evidencias”, enfatizó Pereira.

Por esta razón también se convocará al propietario del taller de chaperío para que declare y explique por qué aceptó realizar este trabajo sin antes avisar a la Policía sobre el rodado.

“A nosotros no nos interesa de quién se trata, no hay ningún privilegio para nadie, como nos han venido cuestionando. Este hecho del albañil es un claro ejemplo de que hacemos nuestro trabajo y esclarecemos los hechos, así nadie denuncie porque lo tenemos que hacer”, apuntó el director de Tránsito.

Choque de un bus con un jeep

Asimismo, Tránsito dio cuenta del accidente de un bus de transporte interdepartamental de la empresa Bolívar con un jeep, provocando que una niña de cuatro años quede gravemente herida en el hecho.

El accidente se registró a 27 kilómetros de San Germán, cuando el bus placa 2985-GME, al mando de Limberg Chavarría Flores, que viajaba de Santa Cruz a La Paz con casi 40 pasajeros, trató de adelantar al jeep, con placa de control 2803-UFC.

Cuando el bus realizó esta maniobra, el jeep giró hacia la izquierda para apartarse de la vía y el otro motorizado lo impactó. La niña Melany Maite Muñoz fue trasladada de urgencia hasta el hospital Japonés.

Las primeras pesquisas indican que el accidente se produjo por la imprudencia de ambos conductores.