La Gobernación de Santa Cruz habilitó el Centro de Operaciones de Emergencia Departamental para atender los incendios. Dispone de Bs 1,5 millones para distintas acciones. Los fuertes vientos continuarán, lo que agravará aún más la situación

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17 de agosto de 2019, 10:00 AM
17 de agosto de 2019, 10:00 AM

El voraz incendio que arrasa con pastizales y bosques desde hace varios días en Roboré llegó al valle de Tucabaca, más concretamente entre las comunidades de Naranjo y San Lorenzo, pese a los esfuerzos de bomberos, soldados y funcionarios municipales que combaten el fuego por aire y por tierra desde hace varios días.

Cinthia Asin, secretaria de Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente de la Gobernación, y el alcalde de Roboré, Iván Quezada, confirmaron el dato al señalar que lo que está ocurriendo en ese municipio es una tragedia.

La Reserva Municipal del Valle de Tucabaca cuenta con 262.305 hectáreas, creada en 2000.

Los lugareños la protegen como la niña de sus ojos, pues posee un inmenso capital natural, conformado por serranías, caídas de agua y bellos paisajes.

En sus montañas están las nacientes de los ríos que abastecen a toda la región y a la zona sur del Pantanal boliviano, según lo describe Giovanny Vera.

La noticia se conoció el mismo día en que la Gobernación de Santa Cruz declaró en emergencia al departamento, por los incendios, las heladas y la sequía. Los incendios en Roboré son de mayor magnitud, por ello, allí están desplazadas unas 100 personas.

Personal de Defensa Civil, a bordo de dos helicópteros, también combaten los incendios desde el jueves; sin embargo, no han podido sofocarlos.

El viceministro de Defensa Civil, Óscar Cabrera, detalló que uno de los helicópteros tiene capacidad de 900 litros y el otro, de 800. “El trabajo continuará hasta apagar los incendios. Vamos a trabajar los días que sean necesarios y, si se precisa, se aumentará la cantidad de helicópteros”, manifestó.

Emergencia departamental

El Centro de Operaciones de Emergencia Departamental (COED), al mando de Enrique Bruno, secretario departamental de Seguridad Ciudadana, declaró emergencia departamental a Santa Cruz por estos desastres.

Bruno dijo que se dispone de un presupuesto de Bs 1,5 millones para acciones y que, de ser necesario, se solicitará a la Asamblea Legislativa Departamental el desembolso de más recursos.

Hasta ayer cuatro municipios se habían declarado en desastre: Roboré, El Trigal, Pampa Grande y San Ignacio de Velasco.

Aunque hay incendios en diferentes municipios del departamento.

Hasta el jueves la Gobernación cruceña registró 372.433 hectá- reas de bosques y pastizales consumidos por el fuego. Bruno pidió que la Autoridad de Bosques y Tierra (ABT) controle que no se realicen nuevas quemas en el departamento.

“Esas quemas sin autorización se están desatando en incendios, a lo que se suman los fuertes vientos y el bajo estrés hídrico (falta de lluvias)”, remarcó.

La primera emergencia que atendió este año la Gobernación cruceña fue por inundaciones. En aquella ocasión diez municipios solicitaron ayuda, entre ellos Lagunillas, Cuevo, San Juan, Buena Vista, Charagua, Pampa Grande, Camiri y Yapacaní.

Incendios activos

Cinthia Asin detalló que hay otros incendios aún activos en el departamento. Por ejemplo, en San Rafael hay uno a 40 kiló- metros de la zona urbana; en El Carmen Rivero Tórrez hay otro por la carretera Bioceánica; en San Matías el fuego afecta a una comunidad y en San Ignacio de Velasco existe un incendio activo que afecta a la comunidad Consuelo.

Según el Sistema de Alerta Temprana de Incendios Forestales (Satif), en lo que va de este mes hay 6.025 focos de quema, es decir, una cifra próxima a la registrada en 2010, cuando en todo el mes de agosto se contabilizaron 11.824 focos de quema. Ayer, pasado el mediodía, también se registró un incendio próximo a la zona urbana de San José de Chiquitos.

En cuestión de minutos las llamas se expandiero, pero gracias a la acción de vecinos y bomberos, fueron controladas. Asin remarcó que la zona más afectada por los incendios en el departamento sigue siendo la Chiquitania, que concentra más del 50% de los reportes desde que se empezó la época de chaqueos.

El 70% en riesgo

De acuerdo con el Satif, el 70% del departamento está en riesgo extremo de ocurrencia de incendios forestales, debido a las condiciones climatológicas. Además, el 1% tiene riesgo muy alto.

La responsable de Recursos Naturales, Yandery Kempff, explicó que el departamento cruceño es el más afectado del país por la deforestación, por lo que estos incendios tienen un daño aún mayor en el medioambiente.

Según los informes del Satif, el 56% de los focos de quema se registran en tierras de uso forestal, el 20% en las de uso agropecuario extensivo y el 18% en las de uso agrosilvopastoril.

Toda esta situación, además de dañar al medioambiente, puede afectar directamente a la salud de la población con problemas respiratorios debido al humo. Por ello, el director del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Marcelo Ríos, ha solicitado que el personal de salud de los municipios esté en estado de alerta.