Pese a las requisas, sigue ingresando droga y alcohol, pero esperan que la tecnología permita un control más eficaz. La tranquilidad en el penal dependerá de que el nuevo comandante continúe la política de trabajo, señala el coronel Siles

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7 de enero de 2019, 4:00 AM
7 de enero de 2019, 4:00 AM

“Sigue habiendo el microtráfico de drogas en la cárcel de Palmasola, no lo podemos negar, pero sí puedo garantizar que se ha reducido. Hoy se comercializa entre 800 gramos y 1 kilogramo de droga diariamente, pese a que los controles se han incrementado”, afirmó a EL DEBER el comandante departamental de la Policía, Alfonso Siles, respecto a la situación actual de Palmasola luego de casi 10 meses de la retoma del control del penal, el 14 de marzo de 2018.

“Lo que había no era microtráfico, sino tráfico de drogas”, afirmó el jefe policial.

Sin embargo, destacó, de aquí en más, con la entrega de escáneres por parte del Ministerio de Gobierno, que permitirán detectar a ‘tragones’ de droga, así como equipajes, en los ingresos al penal, los controles serán más eficaces. Sustenta estos datos en los informes diarios que recibe de parte de la Gobernación del reclusorio. Asimismo, indica que también sigue habiendo ingreso de bebidas alcohólicas y que en muchos casos hay agentes policiales implicados en ello.

Por eso, ante la consulta de si la relativa calma conseguida en Palmasola será sostenible, aseveró que dependerá del trabajo del nuevo comandante departamental para continuar con las políticas institucionales. “Ojalá el próximo que ingrese venga con esas ganas y amor al pueblo cruceño para seguir con las políticas buenas que se han implementado”, afirmó.

Al respecto, el director nacional de seguridad penitenciaria, Daniel Mérida, con ocasión del consejo consultivo penitenciario realizado en Conaltid, instó a los malos policías a un cambio de actitud. “Tenemos que ser más profesionales, más institucionalistas para que no estemos en el ojo de la tormenta todos los días”, indicó.

Afirman que no hay violaciones

Un tema que era un secreto a voces en el penal antes de la intervención, en marzo del año pasado, eran las violaciones a las mujeres que iban de visita. Consultado sobre el tema el director nacional de Régimen Penitenciario, Jorge López, afirmó que en diciembre realizó una inspección a Palmasola y verificó in situ la presencia policial dentro del PC-4 (que aglutina a la mayor cantidad de internos) y corroboró las rondas policiales diurnas y nocturnas, aunque señaló que sigue habiendo una mínima cantidad de internos que no quieren convivir en paz.

Asimismo, Mérida, con ocasión de la reunión del Consejo consultivo, dijo que antes “la mujer salía violada y el hombre golpeado, pero hemos desbaratado (a los que hacían eso), ahora hay seguridad las 24 horas del día”. Valoró los avances, aunque reconoció que la cárcel no es una ‘tasa de leche’. Siles a su vez se refirió a que este tema indicando que había violaciones a las esposas y familiares de los internos e incluso ‘secuestros exprés’ en el interior del penal, donde las bandas organizadas pedían dinero a cambio de liberar a las visitas.

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