La encuesta tomó el pulso al comportamiento de los bolivianos en esta fecha. Se prioriza la cena con la familia, se compra en los mercados, se come picana y se brinda con sidra, entre otras curiosidades

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21 de diciembre de 2017, 7:00 AM
21 de diciembre de 2017, 7:00 AM

Un estudio de opinión realizado por la empresa Captura Consulting los días 12 y 13 de diciembre de este año a habitantes de Santa Cruz, La Paz y Cochabamba sobre la esencia de la Navidad, que se celebra el 25 de diciembre en muchos países del mundo, reveló que un 57% de la gente boliviana consagra esa fecha a compartir en familia, mientras que un 34% (segundo lugar) respondió que el objeto festivo es el nacimiento de Jesús.

La consulta, realizada con 132 encuestas en línea a la opinión pública, contiene 10 preguntas (ver infografía en la página 6) y se hizo a hombres y mujeres con edades comprendidas entre los 25 y 60 años.

En la segunda pregunta ¿cuáles son las dos actividades principales que realiza en la Navidad?, se obtuvo que la mayoría cena en familia ( 97%); intercambia regalos con familiares y amigos (41%); arma el pesebre (32%); arma el árbol de Navidad (27%); y asiste a misa (10%) .

Pierde su esencia 
La socióloga Jenny Ferrufino señaló que el mundo religioso, en especial el de los católicos, entiende el significado del nacimiento de Jesús como un momento íntimo familiar y muchas personas sienten que la fecha es propicia para hacer una reflexión de sus vidas, de las relaciones familiares, de los resentimientos y sienten que es un momento de la reconciliación personal y con los demás.

Empero, Ferrufino advierte que este fenómeno de privilegiar las reuniones familiares en Navidad, vinculado a ingresos económicos extraordinarios como el aguinaldo, han generado una cultura consumista bastante fuerte al punto de que la adquisición de regalos, la preparación de la cena y la vestimenta a estrenar han dejado en segundo plano el acto religioso de la Navidad.

Erwin Bazán, vocero de la Iglesia católica en Santa Cruz, indicó que en la víspera de Navidad se nota una masiva afluencia de fieles a los templos para la misa de gallo, que se celebra entre las 20:00 y 21:00. La asistencia a las eucaristías disminuye el día 25. “La Navidad es la encarnación del hijo de Dios, por lo tanto debe ser el centro de la celebración. La reunión familiar debe ser la consecuencia del nacimiento de Jesús”, expresó.

Fe y derroche económico

Maritza Sejas Alanes es profesora en un colegio fiscal y en otro particular. Ella, su esposo, Selman Quiroz, y sus hijas Mishell y Gisell (gemelas de 23 años) y Lorena (15) se reúnen con otros parientes a celebrar la Navidad en su domicilio, donde comparten una cena, previa entrega de regalos, sobre todo a los niños.

“No viajamos a ningún lugar. Nos juntamos en casa y compartimos una cena basada en pollo o carne de res. El chancho lo dejamos para Año Nuevo. Pero antes de la celebración nos vamos a la misa de las 20:00 en la catedral, caminamos un rato por la plaza y volvemos a cenar”, manifestó Maritza.

La maestra confesó que acostumbra gastar su sueldo del mes o el aguinaldo para comprar regalos a sus hijas, a sus sobrinas y sobrinos. Calculó que adquiere cuando menos 20 regalos. “No son de alto costo, pero me aseguro de cada quien tenga su regalito”, concluyó.

Limbert Mamani Cruz (27), estudiante de electrónica domiciliado en la ciudad de El Alto, dijo no saber si cenará con los suyos la noche del 24, porque sus padres y sus hermanos están dispersos. Aseguró que destina un 70% de su aguinaldo en regalos para sus sobrinos e hijos de algunos amigos. Se confiesa católico, pero no acostumbre asistir a actos religiosos en esta fecha.

En cuanto al comercio, la encuesta reveló que un 59% de la gente compra sus cosas en mercados o ferias, un 41% en los malls y un 37% en supermercados. Este comportamiento, según la socióloga Ferrufino, evidencia que los mercados siguen siendo los lugares donde se puede encontrar el producto más barato.

En las compras en los malls se imponen tres criterios, a decir de la especialista: la seguridad, la comodidad y el estatus social. “La gente cree que comprando un producto en un mall, que seguramente lo puede encontrar en el mercado, le da más categoría”.

Costumbres arraigadas

Los bolivianos encuestados dieron cuenta de que la picana (sopa con cuatro diferentes carnes, verduras y vino en su cocción) es el plato preferido para la cena de Nochebuena (un 40% así acostumbra), relegando a un segundo lugar al chancho (33%) y a un tercero al pavo (15%).

¿Y con qué van a brindar a la medianoche? Con sidra, que está en la preferencia de un 61%. Por detrás se ubica el vino (16%), que empata con el champán. 

En cuanto a la solidaridad que supuestamente despierta esta festividad, un 51% afirmó que dona ropa o juguetes, mientras que un 27% confesó que nunca realizó donativos ni acción social alguna. Por último, un 8% ha donado a voluntariados u orfanatos y otro 8% se ha acordado de dar algo a albergues de acogida o en la calle.