La festividad de la Inmaculada Concepción de María y Patrona del Oriente boliviano fue realzada con la visita del cardenal Toribio Ticona. Cotoca lo declaró Hijo Ilustre

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9 de diciembre de 2018, 4:00 AM
9 de diciembre de 2018, 4:00 AM

“Es una gran alegría para el cardenal del altiplano visitar la Amazonia de nuestra patria, estoy muy emocionado por las atenciones y por esta distinción que no merezco, gracias queridos hermanos. Que por la intercesión de nuestra mamita de Copacabana siga bendiciendo Cotoca y a las familias que están aquí”, fue el saludo del cardenal Toribio Ticona, oriundo de Potosí, que fue nombrado cardenal hace siete meses y recién visita Santa Cruz con esa investidura, atendiendo la invitación del arzobispo de Santa Cruz, monseñor Sergio Gualberti para concelebrar la misa de fiesta de la Mamita de Cotoca, este 8 de diciembre en el santuario cotoqueño.

Así hizo referencia a la ubicación geográfica del departamento, su lugar de procedencia y a la distinción que le hizo el Concejo Municipal antes de la celebración eucarística.

Durante la misa, que empezó puntualmente a las 10:00, en cuatro oportunidades confundió la advocación de la Patrona del Oriente, con la virgen de Copacabana, imagen que se encuentra en la península del lago Titicaca. Esos lapsus hacían que los fieles se miren entre sí y otros lo corrijan. El cardenal parecía no percatarse de ello y proseguía encandilado mirando la imagen de la Patrona del Oriente boliviano que se encontraba toda de blanco rodeada de decenas de rosas, en un altar imponente. Los cotoqueños y peregrinos de diferentes latitudes lo perdonaron cada vez que el prelado de 81 años erraba el nombre.

Con el rito de entrada invocó a los feligreses a pedir perdón de sus pecados. Sorprendió nuevamente con el Yo pecador, en quechua, luego lo rezó en castellano.

Ya en la homilía aclaró: “María es una sola”, y no por corregir sus confusiones, si no porque es una gran verdad que conocen los católicos del mundo entero. En esa importante intervención durante la celebración, el cardenal remarcó que debe primar la unidad entre hermanos de una nación y del mundo. “Retengamos en nuestras cabezas la palabra de Dios y digamos sí como María le dijo a Dios papá”. Cada frase o palabras sueltas las traducía a su lengua materna; otra vez los fieles, se miraban perplejos, comentando: “esa debe ser la forma en la que él celebra misa en el altiplano”.

Los peregrinos soportaron los 90 minutos de la misa con el sol inclemente sobre sus cabezas, de pie y distribuidos en toda la plaza del santuario, mientras que los comerciantes por los alrededores no respetaban el oficio religioso, con bocinas y música a todo volumen; más allá las vendedoras de comidas típicas tampoco se enteraban que el cardenal boliviano estaba rezando a la Mamita en quechua.

Anécdotas de obispos

El cardenal recordó que esta fecha tiene mucha importancia y sentido en su vida porque un 8 de diciembre fue ordenado sacerdote en su tierra natal, en la fiesta de la Inmaculada Concepción. Y fue consagrado como cardenal por el papa Francisco el 29 de junio, día de San Pedro y San Pablo.

Por su parte, monseñor Sergio Gualberti, rememoró que con el cardenal Ticona se conocieron un 5 de agosto de 1980, el día de la virgen de Copacabana. “Nos une una amistad de casi cuatro décadas “, dijo el anfitrión de la iglesia cruceña.

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