Fue acompañado por un boliviano que pidió que el nombre del italiano no figure en el registro, según el dueño del alojamiento

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18 de enero de 2019, 4:00 AM
18 de enero de 2019, 4:00 AM

“En absoluto, era un caballero, muy instruido, ¡qué me iba a imaginar que es un terrorista buscado por 37 años!”, dijo el dueño del residencial La Casona, ubicado en la avenida Centenario y cuarto anillo, a la red Unitel, donde Cesare Battisti estuvo alojado entre el 16 de noviembre y el 4 de diciembre. Según el propietario del establecimiento, Enrique Peralta, para su registro, el italiano se hizo pasar por un empresario que había perdido sus documentos y que el boliviano con el que llegó pidió que no registre el nombre del extranjero.

Adujo que él no supo de esa situación, pues quien accedió a esa petición fue un trabajador suyo.

“Había días que el boliviano volvía y lo llevaba a cenar o almorzar y después siempre estaba curioseando los mapas de Bolivia”, relató Peralta al medio televisivo.

Agregó que él le preguntó qué estaba haciendo en Bolivia, a lo que Battisti le dijo que hacía un trato con el Gobierno “porque él tenía una fábrica de cemento y concreto en Brasil y quería aportar para las carreteras”.

La Policía había ido un par de veces al residencial, pero la última vez Battisti ya se había trasladado. Antes de su arresto, se supo que estuvo alojado en un hotel del barrio Urbarí.

También relató que el italiano se sentaba a ver la gente pasar por la calle, que incluso alguna vez se ofreció a cocinar tallarines para él y su esposa y que en ocasiones le gustaba pedir pizza.

Voceros del partido de Gobierno negaron haber tenido contacto con el italiano para los negocios que él adujo a las personas que lo alojaron.

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