Láser en ginecología. Una tecnología alternativa en diversos tratamientos de rejuvenecimiento vaginal

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15 de noviembre de 2017, 6:00 AM
15 de noviembre de 2017, 6:00 AM

Nadie quiere envejecer ni perder el funcionamiento óptimo en ninguna parte del cuerpo y esto incluye la vagina.  En la relajación vaginal los músculos carecen de elasticidad, fuerza y control, los diámetros internos y externos se incrementan y los músculos del perineo son débiles. Cuando la mujer entra en la menopausia hay disminución de los estrógenos, lo cual va a ocasionar atrofia de la mucosa de la uretra y la vagina.

Estadísticas
El 100 % de las mujeres van a tener atrofia vulvo-vaginal, de las cuales el 50 % presentará los síntomas.
En consecuencia, la falta de estrógenos va a llevar a la falta de vascularización y la atrofia. 

Signos y síntomas
Se empieza con el deterioro del trofismo de las vías urinarias y de la  vagina, muy vinculados con el proceso del envejecimiento, la sequedad, irritación y ardor vaginal, dispareunia o dolor al tener relaciones sexuales. 

Prevención de la vejez vaginal
Se le está prestando mucha atención al proceso de envejecimiento en la mujer, por lo tanto no deberíamos de esperar a tener los síntomas genito-urinarios para realizar el tratamiento.

El láser es luz y la luz es energía, esto se transforma en calor, y va a producir un efecto fototérmico/ fotomecánico mejorando el trofismo, por lo tanto, la sequedad, la dispareunia y la irritación vaginal. 

Está especialmente indicado a las mujeres que no pueden seguir los tratamientos de reemplazo hormonal y tampoco pueden aplicarse las cremas lubricantes con altos niveles de estrógenos.

¿Cómo actúa el láser en el rejuvenecimiento vaginal?
El rejuvenecimiento vaginal con láser reduce los diámetros vaginales, es decir, desaparece la sensación de amplitud, se tonifican y fortalecen sus paredes, aumentando el control y elasticidad de la vagina, aumenta la fricción y mejora la sensibilidad vaginal y sexual.

Tratamiento no invasivo
El tratamiento con láser ginecológico no requiere hospitalización, se realiza de forma ambulatoria en tan solo 15 minutos. Después del tratamiento la paciente puede retomar inmediatamente su actividad habitual. Sin embargo, debe evitar las relaciones sexuales durante siete días.